.

viernes, 22 de febrero de 2019

Budiño - Fulgor (2019)

ANTECEDENTES E INTRODUCCIÓN.
El folk gallego, de raigambre celta, es un palo no demasiado visitado en DMR. Hoy lo hacemos de la mano de Xosé Manuel Budiño, músico importante dentro de esta escena y artífice de unos cuantos discos de peso dentro del género. No se vayan a pensar que hablamos de un músico cualquiera, entre otros logros amerita haber actuado con éxito en México, Líbano, Shangai o Irlanda y haber compartido escenario con Van Morrison, Jerry González o La Orquesta Sinfónica de Lorient. Casi nada.

Xosé Manuel Budiño es un virtuoso de instrumentos como la gaita o la flauta y lleva defendiendo su proyecto musical desde el año 1997, cuando publicó “Paralalia”. Ahora ha decidido dar un golpe de timón a su carrera editando por primera vez un disco cantado, “Fulgor”, que además trae consigo las colaboraciones de un buen puñado de prestigiosos amigos como Xoel López o Jairo Zavala (o sea Depedro). Como ahora veremos al repasar el disco, su contenido puede gustar a iniciados en este tipo de música y también a oyentes más ocasionales.

Es justo e imperativo señalar que este disco ha sido posible gracias al mecenazgo del vino rosado Ponte da Boga, que ya el año pasado hizo lo propio exitosamente con “Reina Pez” de Vega. Es de aplaudir que estas iniciativas puedan ayudar a la gestación y nacimiento de discos tan interesantes.

Veamos cómo se desglosa esta agradable sorpresa del inicio de 2019.

ANÁLISIS DEL DISCO.
1. “Fulgor”: El inicio comienza a trazar la senda que seguirá casi todo el resto del álbum. Pop reflexivo, levemente melancólico, con toques celtas reconocibles. Aun así es una canción más cercana al pop que a la vertiente folclórica, dando lugar a un tema agradable y meditativo que acaba con unos acariciantes coros. “Fulgor” es ensoñadora y hermosa. El hecho de que se cante en gallego (como casi todo el disco), lengua a la que no estamos muy acostumbrando si hablamos de pop, no es ningún obstáculo; al contrario, da una bonita musicalidad a las canciones.

2.”Poderosa”: Este tema comparte delicadeza con el tema anterior y, aunque quizá no entre tan de primeras como “Fulgor”, su carácter evocador es incluso mayor. Canción tranquila con matices folk aquí y allá, realmente agradable. En realidad no está tan lejos de algunos aspectos de la carrera en solitario de Xoel López, solo que mientras éste mira más hacia Latinoamérica (en “Atlántico” -2012- o “Paramales -2015-) Budiño tiene un aire más gallego.

3.”Frida”: Pues miren por dónde aquí tenemos la excepción que confirma la regla. Cruzamos el Atlántico y escuchamos una canción de esencia, sabor y hechuras mexicanas. De una forma cálida y tranquila eso sí, como para escuchar en un atardecer. Lo gallego, lengua y música, se unen con el español y México, formando una afortunada simbiosis. En las guitarras está Jairo Zavala de Depedro, que se siente como pez en el agua en este estilo. Buena canción que gustará mucho a las apetencias de la gente nostálgica.

4.”Pulso”: Pues también hay tiempo para el rock en “Fulgor”, y también para ritmos más movidos. En este cuarto tema abandonamos el tono meditabundo y nostálgico para imbuirnos de vitalidad y jolgorio; incluso se hace una referencia a la Motown en la letra. Instrumentalmente ganan en presencia la batería y la guitarra eléctrica. Buena evolución del setlist, con mayor variedad y atrevimiento.

5.”Santiago”: Primer single de “Fulgor”. Una buena armonización de gaitas y piano nos va introduciendo en un pop folk sensible y memorizable. Xosé Manuel une sus voces a la de Xoel López para crear una melodía vocal sencilla pero exuberante a un tiempo. Es una buena canción para representar al disco, por cualidades melódicas y exquisitez en los arreglos.
6.”Boreal”: Más toques de rock melódico, con la animosidad que aporta la guitarra eléctrica. “Boreal” es un medio tiempo de buenas atmósferas que tampoco escatima unos leves teclados en su inicio y en algunas partes de su desarrollo. Más enérgica pero sin perder su poder evocador. En algunos de estos momentos, digamos, más animados “Budiño” puede aproximarse a los gustos de, por ejemplo, algunas canciones de The Waterboys.

7.”San Xoan”: Sencillez acústica y una hermosa melodía son los ingredientes de este tema, y característica importante de “Fulgor”. Tiene un cambio de ritmo que hace que nos alejemos del folk puro para introducir un segmento fácilmente cantarín. Su amabilidad la hace ser encantadora. En esta ocasión la letra está en castellano.

8.”Sós”: Guarda algún parecido con la canción anterior, al inicio una base de piano con efectos y una guitarra acústica van llevando una suave melodía hasta que finalmente se progresa hacia una parte con más cuerpo. Acaba cogiendo una cadencia sencilla, sin llegar al cambio de “San xoan”. De cocción lenta, nunca es desagradable.

9.”Obertura”: Tema instrumental, a pesar de los leves coros vocales, que se basa en el ritmo y unas bases entre lo sintético y lo acústico. Como todo en “Fulgor”, es bonito pero tampoco está pensada para ser lo más destacado. Su cometido es llevarnos hasta el siguiente tema.

10.“Bos amores”: Uno de los mejores arreglos de todo el disco se hallan aquí en forma de melodía de violín. De, hecho estos arreglos y la voz de Xosé Manuel son los que llevan completamente el peso de la canción. Entre la melancolía y la ternura, “Bos amores” tiene una especie de romanticismo otoñal. Buen cierre de disco, o así lo considero yo, pues aunque vengan dos canciones más, no dejan de ser las versiones en castellano de “Fulgor” y “Santiago”.

RESULTADO, CONCLUSIONES Y REFLEXIONES.
“Fulgor” es un disco evidentemente elaborado con mimo en todos los aspectos. Ponte da Boga incluso ha lanzado una edición limitada de vino con el nombre del disco. Éste y, sobre todo, el mecenazgo impulsor que ha dado a Budiño para su última obra dan idea de que aún se siguen haciendo discos con cariño, mezclando arte y artesanía. “Fulgor” es un disco accesible, melódico, hermoso, pero hecho con una exquisitez artística casi cincelada. Aparte de los ya mencionados colaboradores, también se pueden seguir el rastro de Antonio Casado, Luiz Caracol o el Cuarteto Quiroga.

Solo nos queda recomendarles “Fulgor” y estar atentos a la labor como mecenas de la bodega Ponte da Boga.

Texto: Mariano González.

No hay comentarios: