.

domingo, 25 de febrero de 2018

Programa Franco Battiato “L’Arca Di Noè” (Temporada 9/ Programa 7)

Este programa lo llevamos a cabo el pasado sábado 10 de febrero de 2018 a las 16.00h en riguroso directo en el dial de Radio Universitaria de Alcalá de Henares (RUAH). Como no ha habido redifusiones posteriores, aquí tienen la ocasión de escucharlo si no nos acompañaron en el directo.

Mariano González y Víctor Prats tuvimos a bien escoger el disco que incluye el tema más representativo en solitario de Franco Battiato para acercarles de forma más accesible la obra de este particular artista italiano.

Pudimos debatir sobre el contenido en particular de este álbum de 1982, más allá de “Voglio vederte danzare”, y también de otros aspectos de la trayectoria temporal colindante del Battiato de aquellos días. A continuación el link a Ivoox para que se lo descarguen y debajo el reproductor para su escucha aquí mismo si lo desean: http://www.ivoox.com/dmr-9-7-audios-mp3_rf_24041596_1.html
Leer más...

viernes, 23 de febrero de 2018

Temporada 9/ Programa 8: U2 y “Achtung Baby” (1991)

Para ser un disco de bastante repercusión histórica, es chocante que nos veamos tan poquitos en la tesitura de poder hablar sobre esta notable obra de los irlandeses U2 este sábado 24 de febrero de 2018 a las 16.00h en el dial de Radio Universitaria de Alcalá de Henares (RUAH).

Está previsto que solamente estemos Mariano González y Víctor Prats; por ello, si nos acompañan en el directo y lo desean, abriremos la línea telefónica de nuestra emisora por si quieren añadir sus impresiones a lo que nosotros dispongamos.

Este trabajo de 1991 abrió un nuevo universo a U2 y fue visto con buenos ojos en general. Lo que vino después de este disco ya no gustó tanto, si bien nosotros somos defensores a ultranza de “Zooropa” y “Pop”; cosas que tenemos.

Será una hora de radio plagada de buena música y en la que abordaremos una etapa más que interesante de este mítico cuarteto compuesto por Bono, The Edge, Adam Clayton y Larry Mullen Jr. Les esperamos.

Links de interés:
Emisión on-line RUAH: http://www.online.ruah.es/
Leer más...

viernes, 16 de febrero de 2018

Havalina - Muerdesombra (2017)

ANTECEDENTES E INTRODUCCIÓN.
Hay muchos elementos confluyentes en Havalina y casi todos me parecen interesantes. Se me viene a la cabeza lo que se solía decir a veces de Héroes del Silencio. Algo así como que eran demasiado heavies para ser pop y demasiado pop para ser heavies. No es que Havalina me evoquen particularmente a los zaragozanos, pero hay un concepto clave: poner un pie a cada lado de la frontera. Havalina podrían ir al FIB y podrían ir al Viñarock, si es que el símil festivalero se entiende. 

Así pues, a lo largo de la discografía de Havalina se puede encontrar rock de alto octanaje, algo de rock alternativo americano, pop, post punk y otros sazonados condimentos. Es como rezar a The Cure y encender también una velita a Black Sabbath.

Su carrera posee ya bastante recorrido y tiene su origen allá por el principio de los dos miles, primera cantando en inglés y luego saltando al castellano en 2008 con su disco “Junio”. Los subsiguientes, “Imperfección” (2009), “Las Hojas Secas” (2010), “H” (2012) e “Islas De Cemento” (2015) han ido labrando una sólida reputación dentro de la escena independiente española. De todos modos Havalina es el clásico grupo al que deseas que tenga más suerte, que pueda llegar un más alto. En cualquier caso, con independencia de su eco, su música es magnífica.

De la formación inicial solamente queda el cantante, guitarrista, teclista (un hombre multitarea) compositor y líder espiritual: Manuel Cabezalí. Viejo conocido, por cierto, de “DMR”; acuérdense de su entrevista, allá por 2010, a colación del segundo disco de The Cabriolets; uno de los proyectos de Manuel Cabezalí al margen de Havalina, al frente del cual estaba la añorada Bimba Bosé. Nótese que es un músico estajanovista y muy solicitado (por Anni B Sweet, Russian Red, Christina Rosenvinge…), cuya hiperactividad también le ha permitido sacar discos en solitario como “Pequeño y Plateado” (2013).

El resto de la formación actual también suena de maravilla, y son: Javier Couceiro en la batería Jaime Olmedo en bajo y teclados. Añádasele a Juan Manuel Padilla en la percusión de algunos temas.

Centrando más el tiro en “Muerdesombra”, es notorio que hay un viraje hacia los años ochenta y hacia los sintetizadores. Personalmente es un hecho a celebrar lo de juntar rock y electrónica; cuando el mestizaje es atinado los resultados son óptimos. Me gustan mucho los discos que emparentan con el “Songs Of Faith And Devotion” (1993) de Depeche Mode, en cuya prole podría contarse (p.ej), el recientemente comentado en nuestro programa, “Adore” (1998) de The Smashing Pumpkins, de un modo más intimista. “Muerdesombra” quizá podría tener sintonía con esta estilística.

En realidad los que gusten de los sonidos oscuros típicos de los años ochenta van a darse un festín con “Muerdesombra”, que si bien tiene menos furia guitarrera no escatima los momentos opresivos en forma y fondo. Nos vemos en unas coordenadas donde se citan las pacientes y lúgubres atmósferas de The Cure, con bases sintéticas de espíritu ochentero y reminiscencias guitarreras típicas de Havalina, entre el hard rock y el stoner.

Un giro de estilo, quizá inesperado, pero gratificante. Para una banda es muy positivo mantener el instinto exploratorio y las orejas tiesas; es fácil estancarse en un segmento concreto. Pero también más aburrido. En lo que a mí respecta bienvenidas sean estas incorporaciones de estilo a Havalina, varias de ellas son de mis favoritas.

“Muerdesombra”, sin ser un disco difícil o esotérico, requiere de varias escuchas para ir notando todas sus virtudes. Es un disco denso, sombrío, pero que va ganando peso poco a poco hasta encontrarnos con uno de los mejores lps nacionales, en mi opinión, de los últimos tiempos. Tómenselo con calma y lo agradecerán.

ANÁLISIS DEL DISCO.
1. “Abismoide”: La primera en la frente. De inicio escuchamos una excelente intro instrumental de un minuto y veinte segundos, con una sólida base rítmica y unos seductores ambientes. Cuando entra la voz de Manuel Cabezalí todo se torna inquietante, comedidamente convulso. Las guitarras hacen filigranas extrañas y el estribillo se alarga dejándonos hipnotizados. También hay tiempo para un potente riff. La letra, como en general durante todo el disco, es más bien críptica y no deja traslucir mucho, pero las imágenes que sugiere son perturbadoras: “Amanecen dormidos en sus jaulas, no reniegan de ti, criaturas más antiguas que tu alma”. Uno de los singles del disco, que además trae un interesante y nocturno vídeo.

2. “Malditos mamíferos”: Una combinación perfecta entre rock y teclados. Desde el inicio unas pulsantes notas de sintetizador se dan de la mano con un electrizante riff de guitarra. Se trata de una canción densa, intensa, con mucho nervio. Puede recordar a los Havalina más clásicos pero con el aditivo de las notas de teclado allí y allá. Las letras siguen siendo contundentes: “He probado la sangre, he mordido mi piel, puedo arrancarme el cerebro, no lo puedo coser”. Otro single, y también con un vídeo muy acorde.

3. “Lazos rotos”: Si bien no es tan directa, esta canción nos lleva hasta las brumas góticas de los ochenta. Aromas a The Cure para una sombría melodía de cuidadas atmósferas y decadentes ademanes. La inmersión en la oscuridad no implica que la canción se aquiete totalmente. La parte rítmica sigue siendo robusta y hay un buen punteo de guitarra al final de la canción. Interesante. La letra quizá nos hable de la dificultad de recomponer una relación tras haber cruzado ya un Rubicón en forma de crisis.

4. “Órbitas”: Probablemente la canción más pop y ensoñadora del disco. Gran melodía, reforzada por una vigorosa guitarra, si bien no tan encrespada como en otras canciones. Hay una calidez melancólica y amable que hace llevadera no sólo la canción sino también el álbum. Es como un paréntesis entre la oscuridad. Dicho esto, tampoco creamos que es exactamente una canción alegre.

5. “Nacidos de la bruma”: Volvemos a la oscuridad y a los ambientes sombríos de la mano de un tema que, quizá atrevidamente, yo diría que tiene influencias del “Disintegration” de The Cure. También lo hace de una forma más envolvente y reptante que en “Lazos rotos” pero añadiendo una interpretación vocal más apasionada. Desde luego el título está escogido a conciencia; “bruma” es una de las palabras que bien pudiera evocar la música de este tema. Las atmósferas, como en todo el disco, están cuidadísimas.
6. “Alta tormenta I”: La primera de una dupla de canciones nos sirve para ver un buen ejemplo de progresión musical y ambición compositiva. De hecho, ya esta primera parte atesora virtudes de complejidad. El modo en que transitamos de un comienzo casi de metrónomo al vivaz estribillo es un buen logro de construcción. También es la ocasión para sacar brillo a la guitarras y mostrarnos un potente riff, áspero y seco, en la onda de Black Sabbath o Queens of the Stone Age. Por cierto, que entre los sonidos se deja sentir una sensación de amenaza, como de temor ante el estallido de la tormenta que menciona el título. A todo esto, “El archivo de las tormentas”, del escritor de género fantástico Brandon Sanderson, parece ser la inspiración de varias letras del disco. Y sin solución de continuidad pasamos a…

7. “Alta tormenta II”: Se confirma el dominio de Havalina para los desarrollos instrumentales y la creación de atmósferas. De hecho no sé sí soy yo que he perdido el oremus o qué, pero a eso de los veinticinco segundos escucho unos teclados que me evocan ¡al Vangelis de “Blade Runner”! Quizá no sea ningún desvarío, en general este tema tiene un aire como de oscura ciencia ficción. Más reflexiva también que “Alta tormenta I”, la conjunción de ambas da un todo diverso pero bien compactado.

8. “Más velocidad”: Buena muestra de las influencias del pop del 80 en el disco, basándose en sofisticadas guitarras y espaciosos teclados. Por supuesto también muestra el colmillo marca de la casa en el potente estribillo. Sencilla y directa fue, con acierto creo yo, el adelanto de “Muerdesombra”. La canción más accesible del disco (junto a “Órbitas”), de fácil asimilación y duradera memoria tras las escuchas.

9. “Trópico fantasma”: Finalizamos de forma pausada, sin prisas, haciendo que la canción se abra paso. Ritmo cadencioso y atmósferas a media luz para una canción que se paladea con atención y con el propósito de dejarse llevar. De los ocho minutos y pico de duración la mitad o más es un segmento instrumental de carácter brumoso e hipnótico. Por estructura y tipo de melodía es un final perfectamente adecuado. Te deja en un estado meditabundo, abstraído.

RESULTADO, CONCLUSIONES Y REFLEXIONES.
Son bienvenidos los sonidos de un conjunto de bandas españolas que se imbuyen del post-punk de los años ochenta. Ahí están: Nudozurdo, León Benavente, Ornamento y Delito… Pero la vertiente atmosférica de esa sonoridad creo que es captada más propiamente por Havalina (sin ánimo de comparar, todas son buenas bandas); y de una manera eficiente. Las reminiscencias a The Cure son enriquecedoras y creativas, no fotocopias inanes. Cada grupo tiene sus propias fortalezas y ésta es una de las Havalina. También, ya decíamos en la introducción, la inclusión de contundentes guitarras hard roqueras es una marca de agua bien utilizada por el grupo.

¿Hacia dónde dirigirán sus pasos Havalina? A saber. Como los melómanos a veces somos un poco como la Gata Flora y nos quejamos si los artistas repiten estilo y protestamos si intentan cosas nuevas, es de comprender que deban abstraerse de contentar a todos. Al respecto creo que podemos estar tranquilos, Havalina siempre han compuesto con fidelidad a sí mismos y han obrado con creatividad. Si acaso, esperamos que puedan apuntar más alto y alcancen más reconocimiento.

Texto: Mariano González.
Leer más...

domingo, 11 de febrero de 2018

Programa The Smashing Pumpkins “Adore” (Temporada 9/ Programa 6)

Retomamos la actividad radiofónica y en general de “DMR” el pasado sábado 27 de enero con la realización del programa que dedicamos a uno de los últimos discos de alta repercusión internacional de la banda liderada por Billy Corgan.

“Adore”, personalmente, nos retrotrae a días o épocas que recordamos con cariño y, sin haber caído en ello o proponérnoslo expresamente, llevamos a cabo la celebración de su 20º aniversario.

Fue un mano a mano en las ondas llevado a cabo por Mariano González y Víctor Prats a las 16.00h del día indicado en el dial de Radio Universitaria de Alcalá de Henares (RUAH). Por si no lo escucharon en su momento, les dejamos aquí insertado el reproductor con el audio y el enlace a Ivoox donde pueden descargárselo si lo prefieren: http://www.ivoox.com/dmr-9-6-audios-mp3_rf_23681702_1.html
Leer más...

viernes, 9 de febrero de 2018

Temporada 9/ Programa 7: Franco Battiato y “L’Arca Di Noè” (1982)

Se me iluminó la bombilla discurriendo sobre quién haríamos el siguiente programa de la temporada cayendo en la cuenta de que en estos años de aventura radiofónica aún no habíamos rendido tributo al maestro italiano Franco Battiato.

De los 2 discos de los que ya hablamos tiempo ha en el blog, hemos consensuado Mariano González y yo que sea “L’Arca Di Noè” de 1982 el que nos sirva de excusa para poder hablar sobre este notable músico italiano.

Y es que, aunque hayamos escogido el disco donde se encuentra uno de sus singles más inmortales, “Voglio vederte danzare” (“Yo quiero verte danzar”), no se queda ahí la cosa y hay mucho más, tanto en este álbum como en toda la carrera de Battiato.

Les esperamos este sábado 10 de febrero de 2018 a las 16.00h en el dial de Radio Universitaria de Alcalá de Henares (RUAH). No falten a nuestra cita.

Links de interés:
Emisión on-line RUAH: http://www.online.ruah.es/
Evento en Facebook: https://www.facebook.com/events/1910941279218051
Leer más...

viernes, 2 de febrero de 2018

Death Cab For Cutie - Codes And Keys (2011)

ANTECEDENTES E INTRODUCCIÓN.
Curioso ejercicio el que afronto con este artículo, dándose por primera vez en la historia del blog la casualidad de que no tenga ni repajolera idea de la historia del grupo que nos ocupa. Con esto, lo de “antecedentes e introducción” quizás no tenga demasiado sentido; más bien, va a ser una intro personal que permita explicarme ante ustedes del motivo de elegir esta obra para hoy.

Gracias a la cadena Kiss TV o Hit TV, tuve acceso a ver el videoclip de la canción “You’re a tourist” de la banda Death Cab For Cutie. Una perfecta canción pop, con una línea de guitarras de tremendo gancho y un buen desarrollo en general. Hablando de todo un poco a nivel musical un día con Mariano González, dio la casualidad que al sacarlo a colación por mi parte me informó que tenía el disco en su poder. Me lo pasó y accedí a él.

No sé ni de dónde son (creo que de América), ni el nombre de su cantante, ni cuántos discos tienen, ni nada de nada. No he querido tirarme el pisto cogiendo datos wikipédicos y si desean saber más información general del grupo, este blog no es el lugar. Aquí me voy a centrar a hablarles exclusivamente de música, de lo que contiene “Codes And Keys”, que más allá de la fabulosa “You’re a tourist”, tiene mucho más y que ha servido de banda sonora personal desde allá por 2013 hasta ahora en mis paseos por Madrid con mi reproductor mp4 a cuestas (llevo mucho tiempo con su escucha, con lo que creo que ya estoy en condiciones).

ANÁLISIS DEL DISCO.
1. “Home is a fire”: Es curiosa la apertura que plantea la banda para iniciar el disco. Es uno de los temas más latentes y misteriosos de la obra, ya incluso desde sus primeros segundos con esa leve e inquieta percusión. La canción puede evocarnos a un “Untitled” del debut de Interpol, en tanto a su papel de canción que no despega y que es una especie de vestíbulo al resto de la obra.

2. “Codes and keys”: Avanzamos al pop más luminoso, dejando la leve penumbra de la apertura “Home is a fire”. La canción título tiene arreglos fabulosos, de formas vagamente orquestales o manieristas. El disco empieza a desplegar sus alas y “Codes and keys” puede que sea una de sus piezas más relevantes.

3. “Some boys”: No nos bajamos del estilo más vivaz y “Some boys” de hecho sube algo la apuesta. Es una de las canciones más inmediatas y sugerentes del lp. De buen gancho, sencillez y efectividad. A ratos es quizás una de mis favoritas.

4. “Doors unlocked and open”: Es momento de dejar el sonido más optimista y pop, y apostar por un sonido que sin dejar de ser vibrante, apuesta por un rictus más serio. Con unas líneas de ritmo que podrían tomar sus influencias de los Joy Division menos obtusos, “Doors unlocked and open” vira hacia un ejemplo de canción con brío y que desemboca bastante bien, en una subida de intensidad patente, notable y correctamente ejecutada.

5. “You’re a tourist”: ¿Qué les voy a contar de la canción que me abrió a este disco? “You’re a tourist” es una canción compuesta melódicamente sin mácula. Tiene un desarrollo sencillamente fabuloso, con unos acordes de guitarra eléctrica tremendamente acertados y de potente magnetismo. El videoclip, de luces y travellings psicodélicos, no es que sea muy original, pero no queda nada mal. Es curioso que una canción que no tiene un estribillo claro (más bien lo es la primera estrofa), funcione tan bien. Hay un momento de reflexión a mitad de pista que tampoco desentona para luego afrontar el tramo final, donde el decaimiento instrumental de los instrumentos mantiene la nota media alta de la composición.

6. “Unobstructed views”: Volviendo al sector menos potente del disco, “Unobstructed views” es una pieza de recogimiento, sosegada melancolía y aspecto reflexivo, en la que hay apuntes y matices sonoros que son dignos de reparar en ellos. Puede quedar algo sepultada en las primeras escuchas por ser la sucesora en el track list de la mayestática “You’re a tourist”, pero esta composición casi instrumental (hasta la mitad no entran las voces), es merecedora de valorarse bien.
7. “Monday morning”: Del cierto y lejano tono trascendental de “Unobstructed views”, pasamos a “Monday morning”, un pop facilito, no muy acelerado, que nos permitirá afrontar capítulos memorables en siguientes pasos. Esta canción es sibilina y sencilla, pero tiene también su gancho y termina captando bien la atención sin necesidad de desplegar excesivos alardes. Menos aquí resulta más.

8. “Portable television”: Con sus notas de piano en sonido continuo, “Portable television” da lugar junto a la previa “Monday morning” a un sector o combo algo naif, pero ciertamente encantador dentro de “Codes And Keys”. Se hace uso del recurso de los coros para darle algo más de empaque y se va sumando algo de instrumentación a medida que avanza la pista, casi sin que nos demos cuenta de ello.

9. “Underneath the sycamore”: He aquí mi favorita del disco, si dejamos de lado a “You’re a tourist”. Para mi gusto, “Underneath the sycamore” es la canción más atinada y accesible del disco. Melodicamente es perfecta. No hay aquí lugar para arreglos y matices sutiles, pero dentro de una elegancia y caballerosidad se maneja fabulosa, con un estribillo de fácil recuerdo que incluye su propio título.

10. “St. Peter’s cathedral”: Personalmente, después del gustazo sonoro que siempre me supone la escucha de “Underneath the sycamore”, la íntima y algo triste en su sonido “St. Peter’s cathedral” me pilla a contrapié. Es quizás uno de los “peros” que le pongo al disco en su orden, que no a la canción, la cual creo que hubiera quedado mejor simplemente permutando el orden con la predecesora. Es una composición trascendental y de atmósferas sentidas que nos acerca al inminente final de la obra.

11. “Stay young, go dancing”: Death Cab For Cutie deciden poner punto y final con un folk floreado y muy luminoso con “Stay Young, go dancing”. En cierta forma, es una buena orden o consejo el que nos da la banda con este título. Además, el carácter tan amable y amistoso de la pista creo que ayuda a terminar la obra bien, quitando hierro al asunto, ya que “St. Peter’s cathedral” sería demasiado densa para haber cerrado el conjunto.

RESULTADO, CONCLUSIONES Y REFLEXIONES.
Pues ahora, lo mismo que en la intro. Ni idea de cómo funcionó (más allá de que aquí en la tv que tenemos de emisión de videoclips sí que llegó), ni de lo que el grupo hizo después, ni nada de nada. Lo dicho, para más información genérica de Death Cab For Cutie vayan a otros lugares.

Aquí, en estos últimos párrafos solamente voy a exponer mis reflexiones personales y conclusiones sobre este más que válido lp. Les dije que será desde 2013 o así que lo tengo y lo llevo escuchando. Dirán ustedes, que sí que he tardado en ponerme con él. Y es que la cosa es que lo he escuchado al aire libre y en largos paseos que por unos u otros motivos me doy en solitario por la ciudad en la que vivo.

El caso es que “Codes And Keys” no es un disco de fácil asimilación, y menos en lugares externos. Hay algunas pistas que sí permiten su disfrute en el aire libre, pero otras son más dignas de escucharlas en casa, con recogimiento y buenos alimentos.

Estamos ante un lp que en sus 11 pistas tiene un tremendo equilibrio pasando por numerosos estados de ánimo. Hay ejemplos de pop de potencia, de pop sencillo, de folk, de experimentalismo, de psicodelia, de recogimiento. Vamos, que tienen donde escoger. Solamente le pongo el ligerísimo punto de mejora en que yo personalmente hubiera cambiado el orden de la canción 9 y 10 entre ellas.

Les prometo que cuando tenga más tiempo, accederé a conocer más (tanto de su historia como de su música) de Death Cab For Cutie, y quizás dentro de un tiempo les pueda hacer un post de otro de sus discos comentándoles algo más de la banda al respecto, pero es lo que tiene que uno guste de ser sincero y no confeccionar este blog a base de copiar información general del grupo del que hable porque sí.

Evidentemente, la información la consigues al leer otros lugares o libros, o escuchar programas de radio, etc., pero como no ha sido mi caso, tras casi 10 años de actividad de “DMR” he tenido a bien hacer un post en estas condiciones: sobre un disco que conozco muy a fondo, de una banda de la que apenas sé nada aparte de la notable obra discográfica que hoy les he propuesto.
Leer más...