Los cada vez más grandes, a cada paso que dan, Second
regresaban a Madrid un año menos una semana después. Mismo sitio, mismo día de
la semana: sala But, club Ocho Y Medio, sábado por la noche. Parecía que el
tiempo no había transcurrido, pero sí lo ha hecho y han pasado desde entonces
muchas cosas. La más importante ha sido la edición del esperado 6º disco de
estudio de los de Murcia, “Montaña Rusa”. Se lo confieso: mi vida,
personalmente, es ciertamente una montaña rusa en este 2013 y aún no tengo el
disco ni lo he escuchado en su totalidad, más allá del rutilante y fenomenal
single “2502”
y los temas “Lobotomizados” y “Las serpientes”, gracias a unos videos apañados
que el grupo ha colgado en Youtube. Por ello, tampoco les podré comentar muy a
fondo el resto de temas nuevos, ya que los escuche por 1ª vez este pasado
sábado. También hay que decirlo, ¿qué mejor forma de escuchar una canción por
1ª vez que con el grupo tocándola en directo frente a tus narices? ¿No?
Bueno, pues tras hacer el programa sobre Oasis en Radio
Universitaria de Alcalá de Henares en riguroso directo a las 16.00h, salimos
del campus universitario del hospital de la ciudad complutense hacia el centro
de Madrid. Quisimos llegar prontito, ya que en la ocasión anterior llegamos un
poco justos y nos situamos regularmente. Esta vez, conseguimos estar en 1ª
fila, pero en el extremo izquierdo del escenario según miras al mismo. Ahí
vimos la actuación cojonudamente, pero la experiencia nos la amargaron en parte
gente alegre que estaba en el piso de arriba, que lo mismo te rociaban con
parte de sus bebidas que te tiraban smartphones de la marca de la manzana
mordida, a riesgo de que te abrieran la cabeza. Con esa “espada de Damocles”
permanente en la cabeza, lo mejor es decir que la cosa, por fortuna, no pasó a
mayores.
Me llamaba mucho la atención del evento, más allá de la
admiración que desde el primer momento tenemos por Second, que la noche se
completaba con la actuación como teloneros de Kuve. Un grupo del que he tenido
noticias gracias a la gente de Promociones Sin Fronteras (nuevamente
agradecemos a Mónica Caballero que nos acreditara para informarles de este
evento) y también gracias a la difusión de su video “Singapur” en Kiss Tv.
“Regresión”, su primer disco, lo tengo en mi poder desde
hace unos meses, pero (de nuevo les remito a mi caos vital de 2013 en distintos
aspectos) todavía no he podido desprecintarlo y escucharlo (cosa que
haré sí o sí en las próximas semanas; así me lo he propuesto). Por ello, al
igual que con Second y “Montaña Rusa”, la primera percepción de sus canciones
sería en su toma en directo. Kuve son un dueto, formado por chico y chica,
encargándose la chica de las voces y teclados. Sin embargo, en directo se
acompañaron de más músicos de sesión (bajista, otro guitarra y batería). La
primera de las canciones que tocaron fue “Mi mente en el congelador” y me dejó boquiabierto. Es raro
que una canción de primeras escuchas (y más en directo) me guste tanto
(solamente me ha pasado una vez en mi vida, creo, de forma tan clara; fue con
Supertramp y “Downstream” en mayo de 2002 en el Palacio Vistalegre. Tomen
nota), pero este sábado con “Mi mente en el congelador” se dio una de esas experiencias musicales
tan especiales.
Tras esa forma de comenzar el show tan buena, Kuve prosiguieron
presentando su lp “Regresión”, destacando canciones muy válidas como por ejemplo “Dando vueltas”. Me imaginaba, sobre todo contaminado por el
carácter del single “Singapur”, que Kuve eran más electrónicos de lo que son en
realidad. En directo experimentaron una mayor fuerza y contundencia rockera,
que en efecto les acerca a bandas como Garbage, que por ahí han indicado que
pueden tener una cierta semejanza. Como ya he dicho unas pocas líneas atrás, hubo otra canción que me llamó poderosamente
la atención que fue “Dando vueltas”, la cual dispusieron Kuve a eso de mitad de
sus 40 minutos de concierto.
El tramo final lo dedicaron a los temas destacados de
regresión: los singles y futuro single. Llegó “Siluetas de invierno”, próximo
single de Kuve, que sonó bastante bien. Luego tomó las riendas la efectiva
“Singapur”, que puso a la sala patas arriba como era lógico prever, y para el
cierre formal se metieron con el primer single y apertura de “Regresión” “Nadie
te dijo”. Abajo les dejamos insertado un fragmento que grabamos de “Singapur”.
Fueron 40 minutos de actuación notable, enérgica a ratos (como por
ejemplo cuando la cantante se metió a la percusión a darle con fuerza a un
tambor cercano al mástil de su micro, se ve en la foto de abajo de este párrafo) y que nos encantó. Si 61 Garage nos
parecieron unos teloneros destacables en el concierto del miércoles de Vipership en la sala El Sol, Kuve nos sorprendieron si cabe más positivamente.
Sus canciones funcionan muy bien en el directo y su vocalista en escena es
realmente carismática (además de muy guapa, que también hay que decirlo) y se
mueve fenomenalmente bien en escena, alternando sus tareas vocales,
instrumentales y los bailes y desplazamientos de un lado al otro del escenario.
Se lo tengo que decir. Hoy que he tomado por banda el cd,
aún precintado, de “Regresión” y al ver el dorso y ver el track list, he visto
que la cantante de Kuve (cosa que no sabía aún, imperdonable) es ni más ni
menos que Maryan Frutos. Sí, la hermana de Sean, cantante de Second. ¿Se
creerán ustedes que a Maryan ya la vimos junto a su hermano en el escenario en
aquel grandioso concierto de la Joy Eslava de fin de gira de “Fracciones De Un Segundo” y que no fui capaz de reconocerla
en escena? Cierto es que su estilismo de aquel día, con sombrero y tal (muy
Christina Rosenvinge de los 80) no tuvo mucho que ver con su look de este
pasado sábado, pero me ha parecido notable que no diera cuenta insitu de todo
esto.
Ahora entiendo porque Kuve suenan tan bien. Se ve que la
familia Frutos llevan el tino musical en los genes (no en vano, ya nos comentó
Sean, cuando aún le llamábamos José Ángel en aquella entrevista de febrero de 2010, que también su padre tuvo su banda años atrás). Por eso no he mencionado
hasta ahora el nombre de la cantante de Kuve, para llegar a esta curiosidad que
me ha asaltado ahora al escribir este artículo. Pues eso, Kuve son Maryan
Frutos y Carlos Otero. Tienen madera y “Regresión” suena muy bien. Su directo
es bueno. Auguramos buenas previsiones. Por cierto, su siguiente single
“Siluetas de invierno” tiene letra de Sean; a modo de curiosidad.
Tras quedar más que satisfechos con el papel de Kuve, y
viendo a la pobre Maryan recogerse ella solita sus instrumentos (me dio mucha
pena verla sola, sin ayuda de nadie más, recoger sus teclados y sintes), los
roaddies de Second se afanaban a plenitud para dejar las tablas bien colocadas
para que el quinteto de Murcia saltara a escena. Sobre las 21.50h comenzaba la
intro, se apagaban las luces y el concepto minimalista/futurista artístico de
la portada de “Montaña Rusa” invadía las pantallas de la sala y el telón de
fondo.
No quisieron escatimar Second para comenzar. Empezaron
arrollando con el gran single “2502” .
Vestidos con esos jerseys negros de franja gris clara, icónicos de esta época
del grupo, Sean fue el último en aparecer en escena para acometer esta canción
de interesantes secciones (es impagable en la letra esa reiteración de acciones
“se tocan, se miran, se odian, etc…”).
Gran canción, concebible que sea el inicio de las actuaciones en esta gira,
pero que seguramente, en el futuro, cuando se den giras de siguientes discos,
se reservará para el tramo final de las actuaciones o incluso para los bises,
pudiendo pelearle el trono de final de actuación que a día de hoy tiene
“Rodamos” y que aún conserva (se ve que ha conseguido mantener el pulso a “Tu
alrededor”, canción de “Demasiado Soñadores” que nosotros siempre hemos visto
como un final de actuación pluscuamperfecto; por cierto, “Tu alrededor” no sonó
en ningún momento, y eso siempre me apena). A continuación, insertada casi completa “2502”.
Second quisieron defender “Montaña Rusa” y me atrevería a
decir que lo tocaron de pe a pa sin dejarse un solo tema. Evité 1000 veces que
la vista se me fuera al set list pegado en la posición que ocupó Jorge Guirao,
guitarrista de la banda y en esta ocasión muy encargado de sintetizadores
utilizados en las nuevas composiciones. No me gusta ver el set list de un
concierto antes de la actuación para preservar la sorpresa de los temas; lo único
que vi involuntariamente es que “N.A.D.A.” estaba incluida en el 1er. bis y,
eso, que por lo visto había un bis nutridito y otro de una sola canción, que
fue el que supuso “Rodamos”.
Aunque Sean dijo en una de sus primeras interacciones con el
público (lo cierto es que tardó al menos hasta la 4ª o 5ª canción en dirigirse
de forma clara, más allá de algún “gracias” gritado a pleno pulmón) que el
concierto y sus canciones iría como el disco, como una “Montaña Rusa”, lo
cierto es que de momentos relajados o melancólicos solamente hubo 3. El primero
de ellos vino de la mano de “Más suerte”, que se inmiscuyó en el tramo inicial
del concierto, donde “Demasiado Soñadores” se anotó más temas que incluso
“Montaña Rusa”. Luego, ya en el tramo final, antes de los bises, llegó “Rincón
exquisito”, todo un clásico del grupo, y en el primer bis la mencionada
“N.A.D.A.”.
El resto fue tralla, tralla y más tralla. Energía
desbordante y canciones arrolladoras. Repito, sin haber escuchado aún “Montaña
Rusa”, sus canciones me parecieron muy contundentes y enérgicas. La parte
central del set list estuvo dedicada sin fisuras al nuevo disco y precisamente
los otros 2 temas que conocía “Las serpientes” y “Lobotomizados” fueron
incorporadas más bien hacia el final de la actuación. Y es que sorprendió mucho que el comienzo de actuación se lo
adueñara de forma tan clara “Demasiado Soñadores”. Ahí sonaron “Psicopático”,
justo en 2º lugar tras “2502” ,
la potencia de “Mañana es domingo” (cierto) y los singles “Muérdeme” y canción
título. De los 3 primeros discos del grupo no hubo nada de nada. Ni siquiera de
“Invisible” se rescató un solo tema. De “Fracciones De Un Segundo” solamente se
escogieron los 3 últimos singles. Como pueden ver, el repertorio de Second es
ya tan solvente que pueden permitirse dejar fuera cosas como “Horas de humo” o
“A las 10”
y la cosa funciona igual de bien.
Me gustó mucho que no se olvidaran de “Autodestructivos” de
“Demasiado Soñadores”. Realmente, tal como estaba yendo el concierto, era
lógico que se incluyera en la actuación, ya que su corte o factura venía al
pelo, por su energía y toques electrónicos. Tuvo el honor de cerrar el primero
de los bises. El concierto terminó como ya hemos dicho con “Rodamos”, ante la
cual Javi Vox decidió tirar a tomar por culo su teclado y pidió al público que
hicieran las veces de teclado, no marchando del todo mal la cosa. De esta forma, Second completaron una hora y 40 minutos de
actuación donde nos ofrecieron su “Montaña Rusa”, con un repaso detallado de su
contenido, con añadidura de temas de su álbum anterior y unas pequeñas dosis de
clásicos del relevante en su discografía “Fracciones De Un Segundo”.
Sean Frutos, cantante de Second, nos sorprendió bastante. Es
de todas las veces que hemos visto a Second en acción, la ocasión en la que más
arrollador ha estado. En los conciertos previos Sean mostraba una cierta calma
o comedimiento, que en este concierto se disipó totalmente, suponemos que
llevado por el empuje de las canciones de “Montaña Rusa”, que escuchado en directo
nos ha parecido un disco arrollador y muy enérgico. Quizás las nuevas
canciones, salvo alguna excepción, no tienen el mismo gancho melódico que los 2
discos anteriores, y se ha buscado ahondar más en la adrenalina. Además, en uno
de los nuevos temas, Sean se puso a los sintetizadores a tocarlos justo
enfrente nuestra (véanlo en la foto superior de este párrafo). Lo que no hizo el cantante de Second en esta ocasión, fue
meterse entre el público, cosa que en muchas ocasiones sí que hizo previamente.
En esta ocasión a quien tuvimos más cerca fue a Jorge
Guirao. Pudimos comprobar de primerísima mano sus dotes de guitarrista y el
trabajo de sus acordes en cada una de las canciones. Ya hemos comentado que al
pequeño de los hermanos Guirao se hace ahora cargo de las partes de teclados en
varias ocasiones, cosa que había asignado previamente por asociación de ideas a
Javi Vox, por aquello de sus notas tan notorias de “Autodestructivos”, las
cuales sigue ejecutando. Vean arriba de estas líneas a Jorge esforzándose a pleno pulmón en los coros, en línea de 3 con Nando y su hermano Fran al fondo.
A Fran y al propio Javi les teníamos en la otra punta del
escenario. Fran llevó a la perfección las tareas de batería y se dirigió en
alguna ocasión al público, como es tradición, en los bises y Javi Vox, de
cuando en cuando se daba un paseo por el escenario para llegar a los dominios
de Nando Robles, bajista de Second, con el cual tenía algunas conversaciones
bastante divertidas, por lo que daba la impresión, cuando comenzaban a tocar
alguna canción a la par que afinaban sus instrumentos. Aquí arriba les dejamos una foto de Javi en el único momento en el que se vino a nuestras cercanías. Nando Robles en muchas
de las nuevas canciones tiene sectores de fuerte protagonismo, en el que su
bajo sonó realmente bien; de hecho, en esas ocasiones, Nando se pasó al borde
del escenario, prácticamente delante de nosotros y pudimos comprobar de primera
mano la potencia y gancho rítmico de sus notas. Abajo, Nando, muy serio.Alguno quizás podrá achacar a Second que se dejaran temas más antiguos de gran calado entre los fans, sobre todo los referidos a la ausencia de representantes de “Invisible”, pero no hay que desesperar. Second es una banda que con cierta periodicidad se deja caer por la capital y estoy seguro que en el siguiente concierto habrá más ítems añejos que harán las delicias de la audiencia. No obstante, esto será para alguno que otro, ya que la sala completa fue un clamor recibiendo cada una de las nuevas canciones de “Montaña Rusa”, antes incluso de que comenzaran cuando Sean las anunciaba o si no mediaba introducción, con los primeros acordes de cada una. Tocaba presentar “Montaña Rusa” y de eso se trató.
Eran las 23.20h aproximadamente cuando los 5 Second dejaron
el escenario y salimos de la sala en pro de cenar algo. Cuando quisimos
retornar a la sala para acceder nuevamente y ver a Second en dj set, había una
generosa cola en mitad de una noche jodidamente fría en Madrid y declinamos
volver a entrar por el rato que podríamos estarnos fuera hasta volver a entrar.
Me dio lástima, ya que me hubiera gustado poder hablar con los componentes de
Second y también de Kuve para poder dejarles aquí alguna entrevista insertada,
al igual que también por poder ver a la gente de Promociones Sin Fronteras, a
los cuales no encontré antes del concierto. Tomamos el último metro en la
estación de Alonso Martínez, línea 4, y dimos por finalizada la noche. Vean la siguiente imagen; aunque ciertamente movida, muestra una situación clásica del final del concierto, con Sean por los suelos y con el ya mítico salto, guitarra en ristre, de Jorge.
Intuíamos una gran noche de sábado y no nos equivocábamos.
De hecho, Kuve nos sorprendió más gratamente de lo que esperábamos, aunque ya
pensaba que probablemente me iban a gustar. Second demostraron una vez más que
son una banda al alza constante. Sus pasos son más medidos que los de otras
formaciones del sector indie, pero son firmes y afianzados. La presentación de
“Montaña Rusa” en Madrid, con el consecuente cartel de “entradas agotadas” en
la puerta, supone un nuevo éxito en su trayectoria. Una subida de un peldaño
más en la escalera. Quizás no tardemos mucho en ver a Second dando el salto a
la sala más grande (aunque no es mucho de nuestro agrado) de Madrid, La Riviera.
El ciclo de un año se ha completado correctamente. Estén
atentos, que seguro que Second darán no a mucho tardar algún que otro concierto
más íntimo y privado en Madrid, tipo del que dieron en febrero de 2012 en la
sala Independance; no es que tenga noticias de primera mano, pero es que ya
conozco al grupo y me puedo oler este tipo de cosas. De aquí a entonces espero
acceder a “Montaña Rusa” e ir con los deberes hechos, aunque reitero que
escuchar esas canciones tan potentes de primera mano en directo fue algo
impagable. Ya no sabemos cuántas son las veces que hemos visto a Second en
concierto, pero sí que puedo afirmar que junto a aquella breve actuación en el
Universimad de 2011, es la ocasión en la que más intensos y enérgicos les he
visto. Siempre nos satisfacen y por eso no nos cansamos de acudir a sus
conciertos y de informarles aquí de sus andanzas y mostrar tan claramente
nuestro sincero apoyo.
2 comentarios:
Gran cronica a ver si un dia de estos te llamo y te cuento mis andanzas
Jairo, primero de todo, disculpas por la tardanza en responder.
Celebro que te gustara la crónica. Deberíamos hablar más, pero se terminó mi tarifa plana... :(
Gracias por escribir.
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