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miércoles, 14 de junio de 2023

Concierto La Broma Negra. Madrid (02-06-2023)

2ª ocasión que vemos a La Broma Negra con su extensa formación actual en directo, tras la vez que supuso el concierto en la sala Moby Dick del pasado día de Reyes de este año. En esta ocasión nos trasladábamos al centro de Madrid, en la zona de Tribunal, para ver al grupo actuar en la sala BarCo. La hora fijada para el arranque eran las 23h y pocos minutos después de las en punto, no llegó a 5, empezó la maquinaria sonora de La Broma Negra.
Esta noche el grupo sonó mejor que nunca. En esta ocasión el encargado de la mesa de mezclas dio con los niveles adecuados y todo ello ayudado por una sala que, aunque pequeña, dispone de una excelente acústica, hizo que este concierto mostrara el lustre que tiene en la actualidad La Broma Negra con sus 6 músicos sobre las tablas que acompañan a Carlos Caballero. El potencial no se vio mermado y es lo que más nos quedará de esta nueva oportunidad de acompañar al grupo en sus representaciones.
El setlist fue un compendio bien equilibrado de temas clásicos del grupo con otros de más reciente creación. De las más actuales, sigue ganando puntos como un tema de mucho caché “Me llamo España y soy alcohólica”. Fue de las escogidas para el primer tramo de actuación y meter al todavía escaso público de primera hora en la propuesta de La Broma Negra, sobre todo gracias al ímpetu y arrojo con el que Carlos Caballero afronta su interpretación. Respecto al público, fue una lástima que la gente no fuera puntual y fueran llegando ya avanzada la actuación; de hecho, la sala terminó registrando un notable aforo de la mitad de concierto hasta el final.
El concierto, respecto al vivido en la Moby Dick meses atrás, en lo que a setlist se refiere mantuvo un planteamiento bastante semejante, con un correcto equilibrio entre los temas del último disco y las canciones más afianzadas de la historia de La Broma Negra. El núcleo duro de fans de LBN acudió, fieles siempre a la cita, y una vez más Carlos Caballero no les dio el gusto de interpretar “Una mujer enamorada es otra forma de terrorismo”, tema cuyo estribillo suele ser coreado de forma recurrente entre canción y canción.
Hubo un momento en el que parecía que Carlos dijo que la iban a hacer, pero lo que sonó fue esa emotiva “Los niños de Dickens”. Quizás el primer gran clásico que sonó en el concierto, no siendo ni mucho menos la última. Brillaron ejemplos como “Cenicienta”, “Protege tus secretos” o “Nieto de maestro de escuela”. Por nuestra parte, grabamos el momento que supuso “Los niños de Dickens” y dicho vídeo se lo insertamos a continuación.

**PENDIENTE INSERCIÓN VÍDEO "LOS NIÑOS DE DICKENS".

Personalmente me gustaron mucho “Rey cuervo” y “Los cuerpos celestes”, pero sobre todo me llamó la atención, por lo comentado del buen sonido del que disfrutó La Broma Negra en esta ocasión, “Heridos”, donde la batería sonó arrolladora y contundente; desde aquí nuestra mención al batería actual del grupo en directo, Gonzalo Corrales, el cual tocó con mucha entrega y actitud a lo largo de los más de 90 minutos de actuación. Junto a él y acompañando a la voz de Carlos Caballero, estuvieron Luis García en los teclados, Fernando Barranco al bajo, Nicolás G. Rengel en la guitarra acústica y eléctrica, Javier García a la guitarra y la notable presencia del violín de Óscar Ximénez, que le da un toque muy personal actualmente a los directos de LBN.
Del frontman del grupo, Carlos Caballero, no es novedad decir que estuvo entregado, pero sí que se le notaba una cierta ilusión especial por lo bien que estaba sonando la actuación. Tuvo momento para bajarse de escenario e interpretar parte de una canción mezclado entre el público y poder observar la estructura que ha formado sobre las tablas desde abajo y lo bien que funciona la creación.
Volviendo a comentar algún aspecto del repertorio, he de citar siempre que aparezca en un concierto del grupo (que suele ser, por fortuna, casi siempre) a “Su decisión, mi capitán”; creo que es una canción que define muy bien cierto sector de la obra compositiva de la banda. Finalizó el concierto con “Martín pescador”, que últimamente viene siendo la pieza escogida para este papel en los conciertos del grupo y que realmente queda apropiada para cerrar la función. Y echamos de menos muchas canciones (“Sonetos”, “Los muertos”, el núcleo duro, ya saben ustedes a cuál…), pero hasta que La Broma Negra no mute en una especie de Springsteen en lo que a duración de sus actuaciones se refiera, tampoco podemos pedir más. Siendo justos y razonables, más que suficiente.
En esta ocasión, más que en otras si cabe, nos quedamos con ganas de más por diversos motivos, destacando entre ellos 2. Primero que el grupo estaba sonando mejor que nunca, con una mezcla de todos los instrumentos perfectamente calibrada. Segundo que la sala estaba en su mejor momento cuando se puso el punto y final a la actuación. La verdad es que nos quedó muy buen sabor de boca y la experiencia mereció la pena por la calidad de la misma en todos los aspectos que hemos ido destacando. Agradecemos nuevamente a Carlos Caballero que nos convocara para otra cita del proyecto que lidera; siempre que nuestra vida familiar nos lo permita, allí estaremos para ejercer como humildes cronistas de lo que disponga La Broma Negra.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Fue otro concierto inolvidable de La Broma Negra. Y van......

Abacab dijo...

Anónimo, siempre son conciertos muy especiales, la verdad.

Gracias por escribir.