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viernes, 24 de febrero de 2017

Lady Gaga - Joanne (2016)

ANTECEDENTES E INTRODUCCIÓN.
Debemos reconocer en DMR que Lady Gaga siempre nos ha caído bien y hemos valorado su música mas allá de esa imagen estrafalaria y de sus supuestos escándalos (ahora cualquier tontería se considera un escándalo, es terrible lo políticamente correctos que nos hemos vuelto); eso no quiere decir que no seamos críticos con su obra. En mi caso concreto siempre me ha parecido demasiado excesiva en sus discos, por no hablar de los pesados discursos que te mete entre canción y canción en los conciertos. Sin embargo, eso no le quita méritos a la frescura electro pop de un álbum como “The Fame” (2008), perfeccionada en el notable “The Fame Monster” (2009) o a su disco más extravagante “Born This Way” (2011).

Después de vender millones de copias en todo el mundo y ser la diva pop de moda durante varios años, muchos veían en ella a la nueva reina del pop, la nueva Madonna. Pero está visto que este título es difícil de conseguir porque hasta ahora ninguna princesa pop ha hecho méritos suficientes y no es que yo sea muy fan de la Ciccone pero al Cesar lo que es del Cesar.

De todas formas siempre sospeché que Lady Gaga lo tendría difícil para mantenerse como una artista ultramasiva: ella demasiado rara, su música demasiado retro, definitivamente no termina de encajar en el mundo de las Rihannas, Katys Perrys y demás y encima no ha grabado ningún dueto con Pitbull. Todo en su contra.

Artpop” (2013) fue su primer tropiezo que significaría una pronunciada bajada en ventas. En realidad es un disco aceptable que contiene algunas buenas canciones aunque otras sean de lo peor que ha hecho nunca, todo ello en un tono de pretenciosidad que no ayudaría nada a vender el disco que, todo hay que decirlo. Tuvo una promoción realmente mala y no precisamente por falta de dinero.

Parece que consciente del deterioro de su imagen como artista, con los medios hablando más de su vestuario que de su música, Gaga comienza una etapa de normalización de su personaje y sorprende con un álbum de jazz junto a Tony Bennett “Cheek To Cheek” (2014), donde podemos disfrutar de su gran voz, pero estaba claro que este álbum era solo un pasatiempo a la espera de un nuevo álbum pop. Y ese álbum llegó, titulado “Joanne” se publicó a finales de octubre del pasado año y como era de esperar sería un álbum que rompería en parte con su pasado, veamos su contenido.

ANÁLISIS DEL DISCO.
1. “Diamond heart”: Gaga empieza fuerte con un tema muy enérgico que podría ser perfectamente un tema rock de estadio, intenciones tiene desde luego pero la producción sobrecargada hace pasar desapercibido este aspecto y tira hacia un pop bailable donde se potencia la voz de la artista, algo que será toda una constante en el álbum. En “Diamond heart” gaga nos cuenta la historia de su vida desde sus comienzos como bailarina de bar hasta convertirse en una estrella del pop. Es un tema muy autobiográfico y de alguna manera también entronca con ese discurso de aceptación de sí mismo que es “Born This Way”. Sin duda un nuevo himno para todos aquellos que han sufrido dificultades en su vida y las han superado.

2. “A-YO”: Este tema me recuerda bastante a “Manicure” de su anterior álbum “Artpop”, con la diferencia de que si aquel tenía un cierto toque glam, aquí la influencia clara es el country, aunque totalmente pasado por el pop. Si bien es un tema poco melódico es bastante divertido. Tenemos la desgarradora voz de la diva que parece enfrentarse y hacer callar a todos sus críticos que la daban por acabada. Gaga suena convincente, segura de sí misma y con ganas de seguir dando guerra en el mundillo musical, aunque eso no impide una cierta sensación de infantilismo con toda esta historia de los haters.

3. “Joanne”: Quizás uno de los temas más simples y a la vez más efectivos y emocionales de su carrera. Bajo un fondo acústico (guitarra, percusión y algunas cuerdas) Lady Gaga consigue una soberbia y lucida balada capaz de erizar la piel, a la altura de sus mejores baladones como “Speechless”. Dedicada a su tía fallecida a la temprana edad de 19 años, algo que marcaría profundamente a su familia, en esta canción es como si Gaga mantuviese un dialogo con esta persona fallecida. Es la primera vez que se destapa esa nueva Gaga que parece querer vendernos en este nuevo álbum.

4. “John Wayne”: Un tema demasiado simple, quizás podría haber formado parte del fallido “Artpop”. Gaga realiza un paralelismo entre la figura de John Wayne y el deseo de un hombre malote y salvaje de verdad ya que se siente aburrida de los hombres en general, a los que considera todos iguales; vamos, rollo Lana Del Rey. En definitiva, un tema desenfadado, comercial y muy pop que poco ayudara a asentar esta nueva etapa en teoría más madura. El tema viene acompañado de un video bastante freak donde tenemos persecuciones, chicos duros, un cuerpo de baile y hasta botas con metralleta incluida; la mano de Jonas Akerlund, culpable de los videos de “Paparazzi” y “Telephone”, es más que evidente y todo es un sin dios muy divertido.

5. “Dancin’ in circles”: En mi opinión el peor tema del disco con diferencia. Llega a irritar por aburrido y por ese cierto toque caribeño barato que le da casi categoría de demo. Para más delito se trata de una de las sonadas colaboraciones del álbum, en este caso el tema fue escrito junto a Beck, pero la verdad es que nadie lo diría si no fuera porque viene en los créditos. Está claro que la Lady Gaga provocadora sigue ahí y esta canción es una prueba, pues se trata de una oda a la masturbación en toda regla: frases como “I lay around, touch myself to pass the time” dejan poco lugar a dudas.

6. “Perfect illusion”: Single de presentación del álbum y sin duda el tema con más posibilidades comerciales. No aporta nada nuevo y podría estar perfectamente en cualquiera de los álbumes anteriores de la artista. Producción con muchas reminiscencias a los años 80, riffs de sintetizador pegadizos, tiene un cierto toque rock a lo “Diamond heart” que no termina de ser explotado y un estribillo simple pero efectivo. No es un single tan incontestable como “Bad romance” o “Born this way”, pero sin duda era la mejor carta de presentación a nivel comercial para este “Joanne”. La canción viene acompañada de un video poco digno de alguien como Gaga que tanto empeño ha puesto siempre en que éstos no pasen desapercibidos. Aquí la vemos en plan loca de los desiertos y luego rodeada de público y tocando con su banda, todo muy simple. Quizás entronca con el concepto de un álbum, entre comillas, sin artificios pero se espera más a este nivel de ella.
7. “Million reasons”: Segunda balada del álbum, predecible al cien por cien y aun así uno de los temas a destacar del disco, Gaga suena realmente emotiva y descarnada, acompañada simplemente de piano, guitarra y poco más. Gaga nos ofrece su visión amarga sobre una relación que se va a pique. Lejos de cualquier artificio y con un cierto sabor country Gaga se nos muestra vulnerable y expuesta. Esta balada sin duda no podrá faltar en esa parte de sus conciertos más acústica y emocional. Otra cosa es el horrible video perpetrado para promocionar la canción con esa Gaga tirada en el desierto después de que el fiestón de “Perfect illusion” le sentara mal y a continuación con el ridículo traje rosa country guitarra en mano. Para olvidar.

8. “Sinner’s player”: Su colaboración con Father John Misty se trata de un medio tiempo ciertamente monótono donde destaca el bajo y las progresiones de guitarra, pero que a los dos minutos ya se hace pesado. Gaga está muy contenida durante tema excepto al final del mismo donde se desata con su potente voz. Las relaciones tormentosas siguen siendo protagonistas, al igual que la autoafirmación de la personalidad y el deseo de ser aceptada tal y como es, con todos sus defectos, virtudes y pecados, constantes inevitables en las letras de Gaga que a base de repetirse con tanta asiduidad van perdiendo fuerza.

9. “Come to mama”: Es el único tema del álbum que tiene una cierta relación con el proyecto “Cheek To Cheek” junto con Tony Benet. Podemos apreciar influencias de jazz y soul, además de un regusto motown en una canción en la que Gaga intenta dar una especie de protección maternal a otra persona en circunstancias difíciles, intentando tranquilizarla. Queda clara la influencia de la religión en las letras de la artista con varias referencias a la biblia. En definitiva un tema bastante disfrutable si bien difícilmente le dará un éxito en formato single.

10. “Hey girl”: Su esperado dúo con Florence Welch no está claramente a la altura de las expectativas y eso que sus dos voces se mezclan en perfecta armonía, aunque destaca más Florence todo hay que decirlo. El arpa de Florence está bien presente, al igual que una instrumentación soulera muy años 70, pero el tema no termina de despegar. Es quizás demasiado plano y retro, suena a ya escuchado y eso no es bueno en una nueva composición. El tema trata sobre la solidaridad entre mujeres, siempre se ha dicho que el peor enemigo de una mujer es otra mujer y algo de razón hay. El caso es que Gaga y Welch se deciden a plantear justo lo contrario, que las mujeres deben apoyarse entre ellas, que ya bastantes dificultades hay en la vida.

11. “Angel down”: Se trata un tema compuesto junto a RedOne aunque producido por Mark Ronson y BloodPop (productores del álbum junto a la propia Gaga). RedOne ha sido pieza fundamental en los primeros éxitos de la artista como “Just dance” o “Poker face” y si un trallazo dance sería lo lógico a esperar, aquí nos sorprenden con otra nueva balada para cerrar el álbum. De nuevo tenemos a la Gaga sobria, despojada de cualquier extravagancia, que consigue un tema de gran belleza que parece casi una oración y que se inspiró en parte en la muerte por arma de fuego del joven afro-americano Trayvon Martin. Gaga está bastante contenida para lo que podría dar de sí su voz y creo que acierta. El tema es un buen final de álbum pero quizás tres temas tan lentos en el mismo álbum se hacen algo excesivos.

RESULTADO, CONCLUSIONES Y REFLEXIONES.
Y dirán ustedes: ¿Solo once canciones en un disco de Lady Gaga? Pues sí, esta vez tocaba contención y tenemos un álbum corto que normalmente suelen ser los mejores. Por supuesto no entro a criticar temas extra de ediciones especiales ni nada de eso (en este caso en la edición especial se incluyen dos temas más y una nueva versión de “Angel down”), no me interesan esas prácticas comerciales poco honestas de artistas y discográficas y considero que lo que cuentan son los temas de la edición standard.

En cuanto a “Joanne” pareciera como si Lady Gaga quisiera desintoxicarse de su pasado excesivo. Ya no nos quiere vender perfumes con olor a semen, ni realizar conciertos en Marte vestida de la rana Gustavo. Si lo pensamos “Joanne” como concepto era el paso más lógico tras el fiasco de “Artpop” y el disco con Tony Bennet, pero no por hacer un disco más orgánico y menos sintético ese disco va a ser mejor y “Joanne” le falla bastante la falta de dirección. Es una serie de canciones cada una de su padre y de su madre con poca (por no decir ninguna) conexión entre ellas. Quizás la influencia country sea lo común a muchas de estas composiciones, influencia por otro lado utilizada hasta la extenuación en multitud de artistas pop americanas, con lo cual que Gaga lo haga ahora resulta bastante cansino y no muy original.

Por otro lado las virtudes del álbum no terminan de darnos ese gran single que todo álbum de Lady Gaga debería tener. Aquí no encontraremos nada con el gancho de un “Bad romance” o incluso un “Applause” si me apuras. ¿Es por eso un mal disco? En absoluto: “Joanne” tiene un buen puñado de buenas canciones bastante aprovechables, el problema es que salvo alguna excepción, nada destaca especialmente siendo un disco que suena bien, con una producción cuidada en la mayoría de los casos, pero que dista mucho de ser ese gran disco que Gaga necesitaría para volver otra vez a su etapa dorada de éxito

¿Es “Joanne” un suicidio comercial? Algo de eso hay, aunque en todo caso suicidio controlado: cualquiera no actúa en la SuperBowl ante millones de espectadores, ni agota entradas en su inminente gira de una forma tan rápida. En todo caso lo que “Joanne” viene a certificar es el abandono voluntario de Lady Gaga de esa carrera por ser la nueva reina del pop y es que sustituir a la madre del invento (Madonna) se está convirtiendo en tarea difícil.

Texto: Alfredo Morales.

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