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sábado, 24 de febrero de 2024

Programa INXS "Kick" (Temporada 15/ Programa 6)

Buen programa el que dedicamos a tributar a la carismática banda australiana y al que quizás sea su disco más grande de su trayectoria. Fue el pasado sábado 10 de febrero de 2024 a las 16.00h en el dial de Radio Universitaria de Alcalá de Henares (RUAH), con redifusiones posteriores al sábado siguiente a la misma hora y los 2 miércoles posteriores a las 23.00h en el mismo dial.

Estuvimos Mariano González y Víctor Prats debatiendo sobre Hutchence, los 3 hermanos Farriss, Pengily y Beers. Pusimos varias de las notables canciones que forman parte de este gran lp de los años 80.

Por si no pudieron escucharlo en su día, aquí les insertamos el reproductor para su escucha directa y el link a su alojamiento en Ivoox para su descarga si prefieren optar libremente por dicha opción; nosotros encantados que nos escuchen de cualquiera de las maneras posibles: https://www.ivoox.com/dmr-15-6-audios-mp3_rf_124815937_1.html
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viernes, 23 de febrero de 2024

Temporada 15/ Programa 7: Spandau Ballet y “Heart Like A Sky” (1989)

Vuelven a pasar por nuestro programa de radio una de nuestras bandas predilectas de siempre. Spandau Ballet retoman el protagonismo de un espacio radiofónico de “DMR” de la mano del que fue su último lp de estudio y el preludio a su separación durante casi 2 décadas.

“Heart Like A Sky” es un disco digno. Lleno de buenas canciones y es justo reivindicarlo, muy a nuestro estilo con esos discos que no están muy bien valorados, a nuestro juicio de forma algo injusta.

La cita será este sábado 24 de febrero de 2024 a las 16.00h en el dial de Radio Universitaria de Alcalá de Henares (RUAH). Creemos que será un programa muy interesante de escuchar, no solo por lo que tengamos que aportar los que hablemos sobre la banda y este álbum, sino principalmente por el puñado de buenas canciones que se podrán escuchar. No nos fallen.

Links de interés:
Emisión on-line RUAH: https://www.ruah.es/emision-online/
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viernes, 16 de febrero de 2024

A Flock Of Seagulls - A Flock Of Seagulls (1982)

ANTECEDENTES E INTRODUCCIÓN.
Aunque el nombre de A Flock Of Seagulls a priori no le diga mucho, seguro que hay al menos un par de canciones que conoce de ellos, asumiendo, claro está, que ya tenga una determinada edad.

Este grupo de Liverpool pasa por ser una cosa parecida a lo que se suele llamar “one hit wonder”. Al menos así lo clasifican muchos. Pero falta precisión en ello, más correcto sería decir “two hits wonder”, porque hay al menos dos canciones que son ineludibles como clásicos de los 80: “I ran (so faraway)” y “Wishing (if i had a photograph of you)”. Incluso tienen más temas con cierta presencia en charts como “The more you live, the more you love”.

Pero esto de las reputaciones en el mundo de la música tiene sus particularidades. A Flock OF Seagulls tienen el sambenito de ser el cénit, o uno de ellos, de lo más kitsch, hortera, y pintoresco de los años 80. Como una mezcla de retrofuturismo y de colorines aderezados con una cantidad absurda de laca. Partiendo de la base de que efectivamente la banda tenía poco o nada de miedo al ridículo, estamos ante caso claro en el que los árboles no dejan ver el bosque.

O dicho en corto, quedémonos con la música y tiremos por la borda todos los prejuicios chorras sobre una época, los 80, y sobre determinados estilos como los new nomantics, siempre presos de cierto desdén por el moderneo y los árbitros de la moda.

A lo que vamos. A pesar de que aún quedan rescoldos del grupo, y de vez en cuando asoman la patita, no podemos decir que su carrera haya sido larga y exitosa- De hecho, su momento de éxito coincide con la primera mitad de los años 80. Vinculados al synth pop, la new wave, y los nuevos románticos-, su primer disco (el que comentaremos hoy) es una magnífica muestra de espíritu pop conciso, altamente melódico, y bastante sólido. Sería un error ver esta obra como una ocurrencia meramente coyuntural, pues sus virtudes musicales han soportado bien los años.

Tanto en las letras como, una vez más, en su recargado atuendo hay guiños y menciones a la ciencia ficción, con un resultado más bien pulp y naif al mismo tiempo. ¿Qué otra banda mezclaría una canción de enamoramiento con una abducción extraterrestre? Pues A Flock of Seagulls. En lo musical no eran precisamente unos virtuosos, pero tampoco eran unos zarpas. A destacar algunos detalles de guitarra de Paul Reynolds, con su característico eco, que incluyen algunos buenos riffs. De hecho, si la producción hubiera sido enfocada de otra manera estaríamos hablando de canciones de rock puro y duro.

El resto del grupo son, para este disco, el cantante y teclista Mike Score, el bajista Frank Maudsley y el batería Ai Score. Lo que puede verse como la formación clásica de la banda, a pesar de la intensa rotación de miembros que ha tenido A Flock OF Seagulls.

Escuchen, si no lo han hecho ya, este estupendo disco repleto de buenas melodías y con mucho más que escuchar que su magnífico y aclamado single estrella.

ANÁLISIS DEL DISCO.
1. “Modern love is automatic”: Ciertamente el disco comienza bastante bien. Ojo a la misteriosa intro a base de sintetizadores y la guitarra con reverb de Paul Reynolds. La atmósfera es pop, pero un pop espacial, estiloso, con bastaste musicalidad. Estribillo certero, y algún vocóder suelto. Uno se queda casi con ganas de más, pues de los casi cuatro minutos de canción, la mitad corresponden a la mencionada intro. Fue doble caraA junto con “Telecommunication” unos meses antes de que saliera el disco, teniendo cierta repercusión en los clubs de Estados Unidos. La letra habla de una especie de amor prohibido por alguna autoridad distópica, en un mundo futuro donde aquello de enamorarse es algo más robótico que otra cosa.

2. “Messages”: Lo mejor es la energía de pop hipervitaminado y juguetón que se nota desde el inicio. Por lo demás es uno de los momentos menos destacables del disco. Es repetitiva hasta bordear el tedio. El primer minuto de canción hace más o menos gracia, pero acaba por ser cansina.

3. “I ran (so far away)”: Llega un plato fuerte con la que es la canción más célebre del grupo. Más allá de lo asimilada que la tenemos, observada con detenimiento es una magnífica composición. Tiene detalles interesantes en la misteriosa intro a base de sintetizadores que luego encuentran el respaldo de la guitarra con eco de Paul Reynolds, de forma relativamente parecida a “Modern love is automatic”. Pero la baza ganadora es la gran melodía pop, no solo pegadiza, también sofisticada, y que une unas estrofas y un estribillo encantador y adictivo. La letra cuenta la estrafalaria historia de un sujeto que ve a una chica tan hermosa que siento miedo y sale pitando, hasta que un OVNI se posa sobre semejante belleza y la abduce. Entonces el chico vuelve y son abducidos los dos. El vídeo musical tuvo eco en la MTV. Consistía en ver al grupo rodeado de espejos, mientras unas féminas de origen robótico o alienígena acosan al sufrido Mike Score.

4. “Space age love song”: Hay un esfuerzo por querer destacar la atmósfera y la musicalidad al mismo nivel que crear ganchos pop. No es tan jubilosa como otras canciones del disco y tiene un carácter más reflexivo. Es uno de los momentos donde la guitarra de Paul Reynolds obra detalles interesante para aportar valor añadido. La melodía vocal es más dispersa, pero es fácil adaptarse a ella. Buena canción. Fue single e hizo top 30 en el Reino Unido. La letra habla ni más ni menos que de un flechazo.

5. “You can run”: Esta es una de las canciones que con otro aroma en la producción podría haber sido un buen tema de rock. De hecho, tiene trazas de ello, como por ejemplo el momento en que entran las guitarras. La canción tiene un tono más amenazante, dentro de lo que cabe, y un poco más de mala leche. A veces Mike Score canta acompañado de un efecto susurrante que da otro toque a su interpretación. El resultado final es un buen ejemplo de new wave sencilla y directa. La letra se resume en algo así como “puedes correr pero no esconderte”, a quien quiera que se dirija.

6. “Telecommunication”: Tiene elementos electrónicos y sintetizados, casi robóticos muy cercano al synth pop, pero en el estribillo hay un cambio de ritmo, casi un zarpazo, donde predomina el rock. O sea que la canción se construye en base a la tensión y al contraste entre el techno de las estrofas y el enfoque más eléctrico del estribillo. Una canción sencilla, pero estrafalaria y un poco freak. Además, es enérgica y divertida, aunque un poco a piñón fijo quizá. La letra sugiere un intento de comunicación extraterrestre con La Tierra, mediante una señal a través del espacio. Fue doble cara A junto con “Modern love is automatic”.
7. “Standing in the doorway”: El inicio vuelve a flirtear con la electrónica para desembocar en el momento más enérgico del disco. El riff de guitarra es puro rock, afilado, punzante y pegadizo. El ritmo, tras la robótica intro, es rápido, casi frenético, directísimo. Una canción que puede descolocar al oyente ocasional de A Flock of Seagulls, donde Paul Reynolds saca brillo a su instrumento. Una canción francamente interesante que se asimila a una especie de “techno-rock”. La letra tiene las consabidas menciones a elementos de ciencia ficción.

8. “Don’t ask me”: Un buen número de pop, agradable y relajado. Se escucha muy fácil y es fácil ponerse a tararearla mientras se escucha. Eso sí, la letra es oscura, contrastando con la ligereza de la música: La Tierra ha sido desolada al parecer por unos platillos volantes. O estos muchachos vieron La Dimensión Desconocida una y otra vez cuando eran pequeños, o eran unos ufólogos frustrados. 9. “D.N.A”: Resulta que A Flock of Seagulls tienen un Grammy. Sí. Al mejor instrumental rock. Teniendo en cuenta que también consiguió ese galardón “Behind my camel” de The Police, tampoco hay que pensar por ello que el tema sea excelso, Eso sí, no es nada tan caótico como la canción de Andy Summers, sino más bien una animada melodía que tiene como hilo conductor un potable riff de guitarra. En la onda de, por ejemplo, “Age of blows” de Spandau Ballet. No molesta, pero no aporta demasiado.

10. “Tokyo”: Es curioso como la capital de Japón era una especie de referencia para la modernidad a principios de los 80. Véase, por ejemplo, la canción de Tino Casal al respecto. Vuelve a ser un pop amable y dicharachero con algún acorde pretendidamente oriental, Una canción de fácil digestión que además está bien hecha. Aunque al fin y al cabo la letra no tiene nada de futurista: un hombre se lamenta de que su chica nunca está en casa, y de que probablemente se haya ido a Tokyo. Pues vale. Aprovecho para decir que estoy revisando la edición originaria del Reino Unido. Existe un tracklist alternativo para la edición de Estados Unidos, donde esta canción no se encuentra, además de variar el orden de los temas.

11. “Man made” La canción más distinta del disco aparece al final. El ritmo es frío, robótico, persistente. Tirando a oscuro. Por lo tanto, encontramos más atmósfera que brillo pop. Y la cosa no les sale nada mal. Y eso que es una canción solemne y relativamente larga (5:42). Casi parece un post punk accesible. La letra se impregna de pesimismo tecnológico, donde las máquinas construidas por el hombre se rebelan y esclavizan a la humanidad (la letra habla incluso de holocausto). Líricas aparte, es cierre de disco bastante bueno, reflexivo, pero sin llegar a la autoindulgencia.

RESULTADO, CONCLUSIONES Y REFLEXIONES.
Este álbum debut homónimo, junto con el siguiente, Listen (1983), son sin duda alguna, las obras más exitosas de A Flock Of Seagulls. Hoy en día todavía se escucha con una frescura extraordinaria y muestra como la falta de pretensiones, en ocasiones, mantiene al pop joven y vigente. Algo así pasa con este disco, cuya mayor ínfula es conseguir unos estribillos potentes y eficaces, que a día de hoy son igualmente disfrutables. Evidentemente hay que tener cierto gusto para los nuevos románticos, la new wave y synth pop, pero es un sonido casi accesible a cualquiera.

Como decíamos antes, “Listen”, merced al rutilante single “Wishing (if i has a photograph of you)”, mantuvo en las zonas nobles de los charts a la banda. Sin embargo, a partir de ahí su estrella fue menguando. El disco de 1984 “The Story Of A Young Heart”, aún mantuvo el tipo con la canción “The more live, the more you love”, pero en un escalón inferior de éxito. Fue un disco además más oscuro, donde incluso había canciones que hablaban sobre el suicidio, como “Remember David”, inspirada en un evento de la vida personal de Mike Score. Y a partir de ahí, una deriva donde el grupo original se disuelve, Paul Reynolds deja la banda y A Flock Of Seagulls pasan a ser un evento secundario o terciario.

Mike Score probó nuevos proyectos, con idénticos resultados fallidos. La banda original se reunió en 2018 para grabar “Ascension”, un disco con versiones orquestales de sus éxitos. Similar concepto tuvo “String Theory” (2021). Y no podemos decir mucho más de ellos, salvo que hubo una subsiguiente gira que recaló en Madrid en 2022.

No podemos hablar, ya decimos, de una carrera deslumbrante, pero sus primeros pasos siguen siendo escuchados como una parte importante de los primeros ochenta.

Texto: Mariano González.
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sábado, 10 de febrero de 2024

Programa Mikel Erentxun "El Abrazo Del Erizo" (Temporada 15/ Programa 5)

Nos personamos en los estudios de Radio Universitaria de Alcalá de Henares (RUAH) Juan Carlos Beaka y Víctor Prats por un lado y por otro lado, telemáticamente, Mariano González, para hablar sobre el 2º disco en solitario de Mikel Erentxun.

Fue el pasado sábado 27 de enero de 2024 a las 16.00h y sonó en directo en el dial de RUAH. Pudimos debatir sobre la figura de Mikel como compositor y sus primeros pasos más allá de Duncan Dhu, con especial interés, como es lógico, en "El Abrazo Del Erizo".

Si no pudieron escuchar el directo o las redifusiones, les insertamos aquí el reproductor con el podcast y también link a su alojamiento en Ivoox para su descarga si así lo prefieren: https://www.ivoox.com/dmr-15-5-audios-mp3_rf_124060527_1.html
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viernes, 9 de febrero de 2024

Temporada 15/ Programa 6: INXS y "Kick" (1987)

Buen programa es el que nos espera este sábado 10 de febrero de 2024 a las 16.00h en el dial de Radio Universitaria de Alcalá de Henares (RUAH). Rendiremos tributo a la banda australiana INXS y su malogrado vocalista Michael Hutchence de la mano de uno de sus discos más exitosos, sino el que más.

Su trabajo de 1987, "Kick", fue el que permitió a la banda abrirse al éxito masivo a nivel mundial. El trabajo se apoyó en un buen puñado de singles de relumbrón que hicieron la labor principal del calado de la obra.

Les esperamos. Acompáñennos a la hora de inicio y escuchen nuestro directo. Estará a buen seguro repleto de buena música a cargo de esta nutrida banda e intentaremos que nuestras opiniones y reflexiones estén a la altura.

Links de interés:
Emisión on-line RUAH: https://www.ruah.es/emision-online/
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viernes, 2 de febrero de 2024

La Zarra - Traîtise (2021)

ANTECEDENTES E INTRODUCCIÓN.
Podríamos titular este articulo como “auge y caída de La Zarra” y no estaríamos muy lejos de la realidad. Además, tanto el auge como la caída se han producido en un periodo de tiempo mínimo y con tan solo un álbum y unos pocos singles publicados.

Fatima Zahra Hafdi más conocida como La Zarra es una artista canadiense con orígenes magrebís que empieza a darse a conocer tímidamente en 2016 gracias a su colaboración con el rapero francés Niro en el tema “Printemps blanc”, después poco se supo de ella hasta el 2020 donde lanza varios singles como “A l’amoniaque” o “Tirer un trait” que la van dando poco a poco más notoriedad y van configurando el estilo de una artista con un universo propio, algo muy difícil de encontrar en el paisaje musical de hoy en día donde abundan las fotocopias de los artistas de éxito.

La forma tan intensa y apasionada de cantar de La Zarra, que nos podría recordar a una mezcla entre Edith Piaf y Marc Almond, unido a ese mundo entre glamouroso y canalla hacen de ella una cantante que difícilmente puede dejar indiferente.

Y por fin en 2021 el éxito masivo le llegaría con el single “Tu t’en iras” que supondría un triunfo absoluto, disco de platino en Francia, premios como artista revelación en la propia Francia y en su Canadá natal y un futuro realmente prometedor. Pero, claro, no es lo mismo enfrentarse a un álbum completo y aquí es donde entramos a analizar este debut de la Zarra titulado “Traîtrise”.

ANÁLISIS DEL DISCO.
1. “Fille de joie”: El álbum empieza con un tema que nos introduce perfectamente en el disco poniendo sobre la mesa todas las constantes musicales que vamos a encontrar a continuación. Una voz intensa muy Piaf que transmite dolor, pasión, desencanto, unas cuerdas muy envolventes y toques de trip hop. Un tema que suena poderoso y contundente y aborda la dicotomía entre mantener una imagen solida de cara a la galería a pesar de vivir en un auténtico desastre de vida.

2. “LVQM”: O “La vie quand même” es un medio tiempo con aires bohemios mucho menos tenso que el tema precedente, con una bonita melodía de piano y algún que otro gancho sintético sobre todo en la parte final donde nuestra protagonista se debate entre el desengaño, el futuro incierto y la aceptación de una vida que no es como a nosotros nos gustaría. La frase “L’amour n’est plus dans le pré” es a la vez cómica y desalentadora haciendo referencia al famoso programa de tv francés que en España se llamaría “Granjero Busca Esposa” o algo así.

3. “Simple ami”: Se abre de una forma totalmente cinematográfica, con unas cuerdas ampulosas, envolventes que forman el esqueleto de una canción donde se plantea ese gran problema de tener a alguien como amigo, pero querer ser algo mas y todo se desarrolla en una especie de juego de ajedrez del que no nos queda claro el final, aunque por lo categórica que suena a veces La Zarra, no parece que se haya llegado a buen puerto.

4. “Tu t’en iras”: Es el gran hit del álbum, tanto es así que podemos decir hasta cierto punto que el enorme éxito de este tema ha opacado un poco el disco, ya que este single sonó incesantemente durante los años 2021 y 2022 y fue promocionado hasta la saciedad. Aquí vemos a La Zarra haciendo un tema de Technopop muy efectivo, algo petardo y con una melodía muy reconocible, donde la artista acepta su destino de ser abandonada por todos los amantes que aparecen en su vida. Todo esto respaldado por una gran voz y actitud. Es de esas canciones que con solo escucharla se identifica un hit en potencia, además contó con un video de esos difíciles de olvidar y tremendamente divertido donde una serie de extraños personajes van apareciendo para su propia desgracia en una especie de road movie de serie b.

5. “TFTF”: O “tout feu tout flamme”, ya con ese título nos podemos hacer una idea de que se trata de una canción completamente incendiaria en lo que se refiere a esos amores apasionados que llevan a la destrucción. Aqui el personaje de La Zarra se explaya a gusto dando rienda a un dramatismo que se va a convertir en uno de sus puntos fuertes. Si encima le acompaña un videoclip que es una especie de corto con asesinatos, lentejuelas, estética kitsch y personajes imposible, nos encontramos con uno de los puntos fuertes del álbum.

6. “Traîtrise”: La canción que da título al álbum, es una especie de mezcla de valls lánguido un tanto siniestro con chanson française que engancha con su melodía circular. Aquí nos encontramos una faceta más frágil de nuestra protagonista. Es una especie de lamento melancólico y amargo ante la pérdida de la persona amada y la confusión que esto provoca, además de lo incierto de un futuro en solitario.

7. “Pas le coeur à la fête”: Es de las canciones más originales del disco. Está perfectamente ubicada después de “Traîtrise” y podría llamarse perfectamente “Traîtrise 2” porque aquí encontramos una Zarra deprimida que poco a poco encuentra una luz al final del túnel y sobretodo fiesta y alegría de vivir. Empieza con un ritmo lento que encaja perfectamente con las frases tristes de la cantante pero que poco a poco se va acelerando gracias a las percusiones y explota en un estribillo que se acerca al tropical house terminando como un tema alegre y bailable. Podríamos considerarlo el antecesor del “evidemment” de Eurovisión.
8. “Comme je l’aime”: Aquí tenemos otro comienzo exuberante y muy cinematográfico que nos puede recordar al “Born to die” de Lana del Rey. El registro de voz es más dulce, aunque hay diversos cambios a lo largo del tema que desembocan en una majestuosa parte final donde destacan unos potentes y efectivos coros masculinos, recurso que se repetirá en otros temas.

9. “Amour de quartier”: Se trata de una balada muy romántica, pero a la vez llena de tristeza como podemos comprobar en la frase “Je t’ai gardé tout près de mon coeur/Même si il est rempli de douleur”. El tema empieza con una bonita melodía de guitarra acústica y poco a poco se van añadiendo detalles dejando atrás el minimalismo para crear un tema perfectamente orquestado, una vez más las cuerdas tienen un papel importante, también se vuelve a recurrir a los coros masculinos dando más empaque al tema.

10. “Ne m’en veux pas”: Es un tema que transmite una gran tensión y nos habla de alguien en una situación desesperada que quizás no está siendo justa con la otra persona pues está demasiado inmersa en sus enormes problemas. Es curioso como el violín consigue crear un cierto ambiente turbio que se combina perfectamente con una base electrónica muy lograda.

11. “Fleur oublié”: Esta balada al piano es una canción delicada y conmovedora sobre una infidelidad y lo aturdida que puede estar una persona cuando vive una situación así. Está claro que la deslealtad y la traición son dos de los temas principales del universo de la Zarra y aquí la cantante consigue introducirnos en la historia hasta el punto de estremecernos y de preguntarnos cuánto hay de interpretación de un personaje y cuanto de la persona.

12. “Je coule”: Seguimos en una parte bastante triste y melancólica del álbum. Aquí tenemos un nuevo drama donde La Zarra es más Piaf que nunca y nos hace ver como poco a poco se va hundiendo entre los reproches a la otra persona por no estar allí cuando se la necesita. Otro tema lleno de dramatismo extremo conducido por el piano que contrasta con una base de percusión electrónica.

13. “Vie d’artiste”: Este es un tema que sin duda resalta en el álbum por la originalidad y la crudeza con que se expresa su temática. Se trata de una triste canción al piano donde podemos apreciar como La Zarra consigue hacer creíbles las penurias de un artista a través de una voz por momentos casi rota, dando una visión bastante realista y poco común sobre este mundo del artisteo donde tendemos a pensar que todo es gramour y recompensas cuando en muchos casos es hambre y hasta indigencia. Lo que nos transmite La Zarra es que más allá de los artistas de éxito mucha gente que se dedica a este mundo tienen serias dificultades para sobrevivir. El efecto de la canción aumenta más aun puesto que estamos ante una interprete con una estética muy glamourosa, hasta diríamos kitsch y viene a decirnos que no sabemos lo que hay tras la imagen ¿Es simplemente una historia inventada o está realmente describiendo sus primeros pasos cuando llegó a París?

14. “C’est une chanson”: Para finalizar el álbum nuestra protagonista ha tenido a bien concluirlo con una canción bastante optimista que tiene un cierto toque de fiesta o incluso himno de taberna, más aún con esas sirenas que meten al final de la canción. Además, los coros también ayudan mucho a crear ese ambiente animado y desenfadado. Sin duda un acierto como final del disco.

RESULTADO, CONCLUSIONES Y REFLEXIONES.
En mi opinión “Traîtrise” es un debut realmente fuerte donde se nota que había mucho material acumulado por elegir y la labor de elección ha sido todo un acierto, nada de los singles antiguos ha sido incluido y todo el material del álbum es nuevo.

En el disco predomina la chanson française pero hay sitio para pop electrónico, el trip hop y ritmos más bailables dándole los toques de variedad necesarios para no hacerlo demasiado monótono musicalmente. Es de destacar lo bien arreglado y producido que está el disco, sobretodo destaca el uso inteligente de las cuerdas en varias canciones o las baladas donde el piano tiene un enorme protagonismo.

“Traîtrise” es un disco en el que La Zarra nos cuenta su vida más o menos novelada y que a veces es intensa, a veces triste y otras incluso sarcástica. Se crea un personaje a través de las canciones que nos hace pensar cuanto de verdad hay en él y cuanto es fachada. En definitiva, estamos ante uno de esos debuts que pone el listón altísimo a la hora de planear un segundo álbum ya que no hay, en mi opinión, ni una sola mala canción.

Hasta aquí todo perfecto, el álbum empezó a venderse bien y es cuando llega la propuesta de Eurovisión 2023 que al final resultaría ser determinante en el peor sentido posible para la artista. Vaya por delante que quien escribe considera este festival un auténtico circo cuyo target son principalmente locas y marujas y, por otro lado, nunca comprendí que una artista de un país pueda representar a otro ¿Qué hacia La Zarra, canadiense, defendiendo a Francia? ¿Qué hacia Celine Dion, también canadiense, en su día ganando el festival para Suiza? No tiene ni pies ni cabeza o que países como Israel o Azerbaiyan, que tienen de Europa lo mismo que Marruecos o Túnez, participen.

En fin, que me voy por las ramas, el caso que La Zarra presento la canción “Evidemment” que es un auténtico trallazo que podría haber estado perfectamente incluida en “Traîtrise”, con una puesta en escena bastante lograda donde el chauvinismo francés enseñó la patita con ese pedazo de bandera que apareció al final. Las apuestas estaban muy elevadas para Francia y no bajaban del top 5, parecía que esta vez, al contrario del año anterior, los franceses no harían el ridículo en Eurovisión y desde luego no lo hicieron, pero los resultados fueron francamente mejorables.

Resumiendo, La Zarra obtuvo un modesto puesto 16 en el festival. En otras palabras, que se comió un mojón y la artista no se lo tomo nada bien y cuando anunciaron la escasa votación del público para ella, esta hizo una peineta a cámara, lo cual, para los franceses, que van de exquisitos y políticamente correctos, esta acción les pareció una auténtica vergüenza que dejaba en fatal lugar a su país.

A partir de aquí La Zarra cae en desgracia, una extensa gira que se presumía muy exitosa tuvo que ser cancelada puesto que el público le dio completamente la espalda y apenas se vendieron entradas, una autentica pena pues disfrutar de la voz de La Zarra en directo no es poca cosa y lo peor es que nada indica que podamos disfrutar de ella sobre un escenario.

Actualmente está muy activa en redes sociales denunciando los ataques de Israel sobre la franja de Gaza (que buena publicidad no la va a dar precisamente) y parece que está grabando un nuevo disco así que parece que al menos tendrá otra oportunidad, ya veremos.

Texto: Alfredo Morales.
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