Adelanto la presente crónica y de forma excepcional publico en día no habitual dentro de la dinámica del blog, ya que de otra manera el próximo sábado coincidiría con otro artículo de concierto (ya les dije que este otoño viene cargadito) y con el respectivo post de revisión de disco que toque. No pretendo saturarles de golpe. Con lo que si ya han leído la revisión de “Flamingo”, ópera prima en solitario del líder y cantante de The Killers, publicada ayer, aquí tienen el resumen que un servidor les deja de su show de anoche en Madrid.
Mal día se presentaba para tener que aguantar una cola a la intemperie. Una jornada que desde la madrugada se había presentada lluviosa, no me hizo pensar en una sesión de espera placentera y seca en las puertas de la sala; sin embargo, tras salir del metro de Puerta del Ángel, y con un periódico que encontré dispuesto sobre la cabeza a modo de resguardo, descubro que no llueve. Daría igual, ya que sobre las 18.30 empezó a caer una chupa de agua tremenda, que de no ser porque una chica de la cola tenía un paraguas de sobra y nos lo prestó a los 3 amiguetes tan poco previsores que nos juntamos, hubiera degenerado en una pulmonía de 3er. grado en el día de hoy.
Tras haber llegado a la cola a las 17.30h, conseguimos situarnos en 7ª fila justo en la vertical trazada desde el poste del micro desde donde partirían los habituales movimientos de Brandon sobre las tablas. La espera hasta que a las 22h saltase Brandon Flowers al escenario, se hizo mucho más corta que la de una hora y cuarto de Supertramp, básicamente por estar acompañado de buenos amigos y por otro lado porque también hubo sitio para unos teloneros nuevamente interesantes. Son varios los ejemplos de teloneros que me han sorprendido gratamente a lo largo de mi vida conciertera; no ha mucho tiempo fueron The Monomes en el concierto de Hombres G de Alcalá de Henares de finales de agosto y también recuerdo con mucho cariño a How I Became The Bomb, como teloneros de Editors en noviembre de 2007 en Joy Eslava en el Wintercase de aquel año, por citar algunos ejemplos.Bueno, pues aquí fueron Rewards los que se llevarían la palma. Lo curioso es que estaban promocionados como cuarteto, pero quienes salieron a tocar fueron solamente 2 componentes, una chica que se encargaba de las bases electrónicas y un chico que era la voz y guitarra. No sé si sería un caso como el de Najwa en el Festival Be Open, que aquel día solamente acudió con 2 componentes que la acompañaban en lugar de toda la banda que la escuda. En todo caso, con solamente 2 miembros en las tablas, se bastaron para dar forma a una serie de composiciones a lo largo de una media hora que se movieron entre lo ambiental, lo gótico a ratos, lo misterioso y que en todo caso es una banda sonora nocturna perfecta para escuchar en casa con buenos alimentos. También resultó exótico el ver en escena a una chica con un aspecto muy parecido a Sinéad O’Connor y a un chico con una apariencia cercana a la del malogrado Kurt Cobain. Menuda mezcla hubiera sido en su día si los 2 hubieran mantenido sus estilos. Al margen de esta pequeña broma, terminemos el apartado de los teloneros diciendo que Rewards supieron aprovechar su hueco ofreciendo una serie de temas con matices muy interesantes. Hubo lugar para la interacción con el público, lo cual también suma a su favor, ya que el cantante y guitarrista habló bastante con la audiencia y también contrarrestó tanta foto por nuestro lado, filmándonos a los que allí estábamos viendo su repertorio. Habrá que escuchar algo más a fondo de ellos, porque no sonaron nada mal. Apuntar que he ido a ver su myspace, pero no me cuadran primero con lo del cuarteto mencionado y 2º porque no figura ninguna chica entre sus componentes. ¿Alguien puede aportar algo al respecto? Se agradecerá cualquier comentario explicatorio. Arriba de este párrafo les he dejado una foto de ellos.Llegaron las 22h y la aparición de Brandon en escena era inminente. Había ganas de ver nuevamente a este carismático chico de Las Vegas, ya a estas alturas consolidado padre de familia. Era la 3ª vez que tenía cita con Flowers, tras los 2 encuentros anteriores con el mismo en junio de 2007 en Las Ventas y en marzo de 2009 en el Palacio de los Deportes, ambos con su banda The Killers y de los cuáles tienen disponible la revisión del último de los citados en el blog; lo digo por si quieren echar un rato la vista atrás.Hay que tener en cuenta algunas consideraciones previas e ir mentalizado a un show en solitario de un líder de una banda y más aún cuando dicho show corresponde a su primer disco en solitario. Hay varias, pero 2 principales que paso a desarrollar. Primero de todo, si estamos hablando de su inicio por su cuenta, más allá del grupo que le dio la fama, no esperes que el repertorio esté plagado de temas de su banda matriz; eso sería hacer de menos a su repertorio y disco actual, que al fin y al cabo es lo que viene a promocionar. 2ª consideración: si tenemos en cuenta la primera explicada, con un disco en el mercado, es normal que la duración del concierto no sea demasiado larga, a no ser que se marque mil y una versiones o toque alguna que otra canción 2 veces (que de vez en cuando puede pasar). Además, hay que mirar el precio de la entrada. 30 eur. para un artista del caché de Brandon Flowers, que aunque venga sin Vannucci, Stoermer y Keuning tiene su tirón, es poco dinero para un show de hora y media. Vamos, que lo más que puedes esperar es una hora y 10 minutos y date por satisfecho.Si llevas principalmente claras estas consideraciones, es probable que quedes contento. Si te esperas algo distinto, probablemente salgas con un cabreo monumental de la sala, pero es que para otros ejemplos futuros que pudieran darse (disco en solitario de Chris Martin, disco en solitario de Alex Kapranos… ¿Yo qué sé?), esto es lo que tocará y mejor que vayan interiorizando lo que hay. Yo lo tenía bien claro, y no me equivocaba. No obstante lo que dispuso Brandon para la noche de ayer, tuvo ciertos giros o marchó por unos derroteros por los que no hubiera apostado a priori y algunos otros que tampoco me hubiera imaginado a medida que se iba avanzando en el concierto.Lo primero de todo fue ver el estilismo de Flowers. Cuando pasados unos 5 minutos de las 22h saltó al escenario de La Riviera, desatando la histeria de todos los seguidores allí congregados, me sorprendió verle vestido en tonos marrones y con unos tirantes por encima de la camisa sujetándole los pantalones; había visto en youtube algún video de la gira, y había visto a Brandon con su habitual camisa y chaleco, manteniendo esa elegancia que era ya marca de la casa en las 2 últimas giras de The Killers. Sin embargo, aquí Brandon Flowers se presentó con un look nuevamente sureño, pero en esta ocasión no asemejándose a un caballero del estilo de Clark Gable en “Lo Que El Viento Se Llevó” (como en la época de “Sam’s Town”), sino más bien cercano al aspecto de un granjero familiar, que vive felizmente con su mujer y sus niños en un rancho; ¿Acaso no será la vida que sigue Brandon en su finca cerca de Las Vegas con su mujer Tana y sus 2 hijos? Ante todo honestidad, pensé. Por otro lado, en lo que a su rostro se refiere, Brandon se dejó una incipiente perilla de 3-4 días, alejada aún del look de “Sam’s Town”, donde tan remarcado estaba aquel bigote; es curioso, ya que en el reciente video estrenado de “Only the young”, Brandon aparece perfectamente afeitado a la par que vestido de una forma tremendamente elegante, al estilo de un James Bond de la época gloriosa de la saga. También hay que destacar que el escenario fue revestido de la estética de la portada, intentando recrear el mobiliario de la misma, con un telón de fondo con unas lámparas enormes sobre la cortina de tonos dorados que cubría toda la retaguardia y la cómoda de cajones de color marfil dispuesta en la zona de los teclados. La tarima que sostenía la batería tenía claramente puesto el nombre del artista, flanqueado por 2 picas de la baraja francesa de cartas, que sumaba al aspecto de casino de Las Vegas que tanto gusta a Flowers.Más allá del aspecto superficial, pero no baladí, de la imagen, Brandon se empeñó en seguir desmontando ideas y tiró por los suelos las apuestas unánimes que habíamos hecho en pensar que “Welcome to fabulous Las Vegas” sería el tema de apertura. De hecho a la postre este tema ni apareció en el set list, siendo el único corte del cuerpo principal del disco que no hizo acto de presencia. Por fortuna, tampoco fue “Crossfire” quien de forma evidente diera el pistoletazo al concierto (recordarán algunos que fui crítico con que “Human” abriera el show del 22 de marzo de 2009 de The Killers en el Palacio de los Deportes), sino que Brandon eligió la versión 2.0 de “On the floor”, que de hecho no aparece tal cual así en el disco. Y es lo que ya comenté en su día, cuando un público está entregado y ansioso de que salgas a escena, cualquier tema es bien recibido y no es lógico gastar una bala potente de inicio. No obstante, creo que “Welcome to fabulous Las Vegas” hubiera sido un mejor comienzo, pero al menos Brandon quiso arriesgar y decidió entrar de forma sigilosa e íntima, sin hacer mucho ruido, para poder comprobar cómo la gente se sabía de pe a pa la letra de esta pista. Acto seguido ya se empezó a hacer camino de forma más marcada con la presentación en la sala de “Crossfire”, la cual propició que la iluminación y juego de luces comenzara con fuerza y la gente se metiera de lleno tras la emoción contenida de “On the floor (2.0)”.Hay que destacar que Brandon estuvo mucho más comunicativo con la audiencia que en sus visitas con The Killers, en las que no habló demasiado. Por ejemplo, tras “Crossfire” le llegaba el turno a la luminosa “Magdalena”, y antes de interpretarla Flowers empleó un minuto aproximadamente de discurso para explicarnos a la audiencia de qué iba la canción, utilizando un inglés correctamente hablado, que permite a toda la gente con unas nociones básicas de comprensión de inglés entender perfectamente lo que nos contaba; por mucho inglés que sepas, a otros cantantes de otras bandas es imposible seguirles el hilo. “Magdalena” sonó brillante, y sus coros tan destacables retumbaron en la sala gracias a que la gente no se pensó ni medio segundo entonarlos como se merecían.Siguiendo con el apartado de la comunicación y dando el salto al final del show, Brandon despachó al resto del grupo, al cuál por cierto no presentó (cosa rara la verdad, ya que de esa forma, alargando un tema, se puede ganar 5 minutos más en el escenario y de paso quedas bien con tus empleados), quedándose a solas con el teclista de prominente barba, el cual empuñó una guitarra española. Flowers en esta ocasión antes de la pieza final, nos contó que una de las mejores cosas que le había reportado este disco y esta experiencia, era el haberle encontrado un sentido distinto al tema con el que daría carpetazo al espectáculo. Apuntó que aunque considera que el tema en sí suena genial y es estupendo como es en su formato original, también le gusta este nuevo enfoque que le han dado. Brandon se estaba refiriendo a una versión acústica del ya clásico de The Killers “When you were young”, el cual sonó muy bien y en parte sumó a favor de la gente que esperaba más de la banda origen del cantante. Alguno que otro por mi zona pedía a gritos “Mr. Brightside”; en esos momentos, me partía de risa internamente.Tras haber hablado del apartado de la interacción vocal con la audiencia, más allá de apuntar que Brandon estuvo más o menos como cuando toca con su banda, es decir, moviéndose por todo el escenario de lado a lado y subiéndose a los bafles de cuando en cuando, con una increíble teatralidad y expresividad en cada uno de sus gestos y muecas, pasemos si les parece ahora al apartado de sorpresas. Quizás en este sector del show, estaría la citada pieza de cierre en forma de versión unplugged de “When you were young”; y realmente para mi lo fue, ya que las otras 2 sorpresas mayores se me desvelaron de forma no intencionada al ver la página “Plásticos Y Decibelios” de Julián Ruiz, en la que el periodista dio cobertura al concierto debut de Brandon en Las Vegas. Ahí descubrí que Brandon Flowers hacía suya para esta gira la estupenda canción “Bette Davis eyes” de Kim Carnes (menudo cachondeo nos traemos precisamente uno de los amigos asistentes al show y yo al respecto de dicho nombre). Y precisamente fue al comienzo del concierto cuando hizo acto de aparición. Brandon estuvo soberbio al micrófono, entonando de forma muy correcta cada uno de los versos de este clásico del pop de comienzos de los 80 y dándole una envoltura muy emotiva.Otra sorpresa, que también me sabía por desgracia, ya que me hubiera supuesto un subidón en su momento en caso de haber desconocido su inclusión, fue que “Losing touch” de “Day & Age” estaba incluida en el show, con una versión menos ampulosa y de bombo y platillo como es la original. Parece ser que Brandon me hizo caso en su día cuando pude hablar con él y le pregunté que por qué motivo no la incluyeron en el concierto de Madrid del 22 de marzo de 2009 y en varios conciertos de su gira. Sonó bien, algo más oscura y decadente, no tan excelente como la original (lo cual es imposible), pero fue en parte una espinita clavada que me saqué de aquel fabuloso concierto que The Killers dieron hace un año y medio en la capital. Gracias Brandon.El resto era más o menos esperado, y lo que tenía en duda un servidor de ustedes era sobre qué pasaría con los bonus tracks de la deluxe edition. En 6º lugar del set list, hizo acto de presencia “Right behind you”, que tuvo una intro en plan acústico que me hizo pensar en una versión 2.0 al estilo de la de “On the floor”, y que a priori dejó en fuera de juego a un amigo mío que adora la electrónica utilizada en esta pieza. Pero, lo dicho, era tan solo una intro y tras la misma “Right behind you” sonó muy parecida a su versión del disco, aunque sí es cierto que con una carga menor en las mezclas para los teclados (o al menos así se percibió en la 8ª fila centrado el escenario). En el bis, aparte de la citada y comentada versión de “When you were young”, se incluyó la pieza medio country “The clock was tickin”; un tema que ya les he comentado que no me hace mucho tilín, pero que debido a la interpretación de Brandon y sus movimientos y gestos durante la misma en el escenario, se me hizo muy llevadera. Además, un tema de este corte country no podía dejarse fuera al presentarse Brandon en escena de la forma que lo hizo con el ya explicado look de granjero y hombre de familia sureño. Por cierto, ¿no les recuerda algo la siguiente foto que le cogí a Brandon, en lo que a su postura se refiere, a la portada del disco “Your Arsenal” de su admirado Morrissey? En esta foto Brandon parece estar más “alegre” que Mozza, al menor por la posición del micro.Como “Right behind you” apareció más o menos temprano al empezar el concierto, daba por sentado que “Jacksonville” estaría incluida en el repertorio. Pasaban las canciones y no llegaba el momento. Sonó “When you were young”, Brandon se marchó a los camerinos, las luces se encendieron y ni el apellido del cantante… En esta ocasión, debido a que había mucha gente vagando por el recinto tras el concierto y que La Riviera no da mucho lugar a la imaginación a la hora de que el artista abandone el recinto, con lo que la gente se apelotona para esperar al artista, no me quedé para intentar hablar con Brandon como hice la pasada ocasión que acudí a ver a The Killers, pero si lo hubiera hecho, le hubiera vuelto a preguntar por “Jacksonville”, al igual que en su día lo hice con “Losing touch”. Quizás si me hubiera quedado, Brandon hubiera tomado nota y en la próxima gira de The Killers la hubieran incluido con un enfoque distinto, ¿quién sabe? En todo caso, que esta pieza no sonara fue para mi gusto el punto más negativo de la noche. También me parece excelente “I came here to get over you” y fue otro de los descartes junto a la potente “Welcome to fabulous Las Vegas”. Por 5 minutos más que hubiera supuesto “Jacksonville” en el show, no hubiera pasado nada y el espectáculo hubiera subido desde mi punto de vista bastante.Hablemos de los puntos álgidos de la noche. Quizás el momento de máxima intensidad vino de la mano de la arrolladora “Jilted lovers and broken hearts”. También dispuesta de forma inteligente durante la parte inicial del show, esta pieza terminó de romper la sala y el público se metió más que nunca en el show, en un in-crescendo de intensidad gracias a disponerse en este orden “On the floor (2.0)”, “Crossfire”, “Magdalena”, “Bette Davis eyes” y luego este colofón de la catarsis en estado puro. Pero en los momentos de mayor brillo no tiene por qué ser la intensidad lo que determine que lo sean, sino la emotividad, y en este apartado destacó sobremanera la maravilla sonora que es “Swallow it”. La gente la ha marcado como una de las piezas preferidas del disco “Flamingo”, y los coros por parte de la audiencia cuando apareció al final del show lo demuestran. Con una tenue iluminación (que en parte me chafó un video que hice de la misma con mi precaria cámara de fotos), Brandon nos invitó descaradamente a sentarnos en su particular habitación de hotel a “relajarnos” tal como dice en la letra de esta gran composición. Acto seguido, también se celebró la aparición del 2º single promocional del disco “Only the young”, que sonó muy bien, destacando aquí los teclados y electrónica sobre el resto, marcándose mucho ciertas notas, al contrario de lo que pasó con “Right behind you”. Abajo podemos ver a Brandon dándolo todo ante el micro.Ya he comentado que solamente faltaron a la cita “Jacksonville” (muy reprochable), “I came here to get over you” y “Welcome to fabulous Las Vegas”. Es decir, el resto de las no citadas también tuvieron su lugar. Por ejemplo, la muy valorada por muchos “Playing with fire” (entre ellos uno de mis amigos), se ganó los favores de ser el tema que dio por finalizado la parte troncal del show antes de los bises. Sonó decadente e íntima, tal como es y evidentemente nos dejaba con ganas de más, bien preparados para la propina que tocaría. “Was it something I said?” se situó más o menos en el ecuador de la actuación y sonó muy simpática y movidita, invitando al público a moverse en lo poco de espacio vital que había entre una y otra persona en una Riviera abarrotada para la ocasión. En este apartado apuntar que quizás estuve más presionado e incómodo antes de la actuación de The Rewards, que luego durante la actuación de los mismos e incluso durante la hora que Brandon estuvo en el escenario. Me esperaba más apreturas e intensidad, como así fue en el Palacio de los Deportes en el desaforado ambiente que se respiraba aquel día con The Killers. Y como no, “Hard enough” también pasó, pero con más pena que gloria en la 2ª mitad del show, en la que las 2 coristas que acompañaban a Brandon tuvieron quizás su mayor momento de protagonismo. Por cierto, abajo una foto de las mismas.Y ya que hablo de las coristas, hablemos del personal que acompañó a Flowers. Aparte de las 2 chicas encargadas de escudar en lo vocal a Brandon, hubo sitio para un bajista, un guitarrista, un batería (que en el bombo de su batería tenía dibujado un flamingo para terminar de rubricar la escenografía del show) y un teclista que no restaron ni un ápice de protagonismo a Brandon. De hecho, como ya he comentado, Flowers ni siquiera les presentó, lo cuál considero un pequeño feo detalle por su parte. Estos músicos tenían bien claro quien es la estrella y para lucha de egos, ya hay suficiente en The Killers, en donde cuando aparecen en escena el único que parece dedicarse a lo suyo sin necesidad de entrar en guerras personales es el serio Mark Stoermer.Tras una hora casi exacta de show, las luces se encendieron y la fiesta llegó a su fin. Debido a que el recinto fue el más pequeño donde he tenido ocasión de ver a Flowers y el tono más relajado de muchas de sus canciones en comparación con la intensidad de las piezas de The Killers, me queda una impresión de haber asistido a un concierto más íntimo, cálido y cercano que los ejemplos de intensidad y energía sin límite que viví con The Killers en 2007 y 2009; de hecho, aquel show en Las Ventas de 2007, también siendo de una hora de duración, fue de los mejores conciertos que he vivido nunca y de los más arrolladores e intensos que he visto. Me eché a reír recordando aquel día las críticas que había leído antes de que The Killers no eran buenos en concierto… Les dejo a continuación una fotografía de un setlist que consiguió un asistente (esta vez yo no estaba lo suficientemente cerca como para ganarme ese favor), para que se hagan una idea más clara si cabe de lo que fue el concierto.En definitiva fue un buen concierto lo que vivimos ayer apenas hace 24 horas. Personalmente quedé satisfecho porque sabía perfectamente qué era lo que había. Las consideraciones previas que hay que tener en estos casos, como ya les he mencionado antes, las llevaba muy claras. Lo único que reprocho es que se dejara en el tintero un tema tan grande como “Jacksonville” en el show, y más aún cuando los bonus tracks de la deluxe edition sí que hicieron acto de presencia. He leído durante el día de hoy un par de crónicas del concierto y la verdad es que me he asustado de la de palos que han metido a Flowers en las mismas.Quizás es que un servidor sea muy fan de Brandon Flowers y su banda y The Killers se confirmen como mis “The Cure de la actualidad”, en lo referido a ser mi grupo favorito, y claro al ser Flowers el líder de los mismos le vea con muy buenos ojos. Intento ser objetivo y creo que lo soy. Desde mi punto de vista fue un show de muy alta calidad y Brandon se ajustó perfectamente a las necesidades de la ocasión, mostrándose nuevamente en escena como un perfecto frontman que llena el escenario, que sabe moverse de una forma muy especial por el escenario y ante todo, y esto es lo más importante, demostrando que es uno de los mejores cantantes de la actualidad. Que no es poco.Ya estoy esperando la próxima vez que vea a Brandon en escena, supongo que para entonces ya con The Killers. La experiencia de ayer mereció la pena y la relación calidad-precio fue satisfactoria. Un aspecto que me da miedo, es que Brandon tiene mucho tirón, aún sin su grupo. Consiguió ampliar el aforo, cambiando de Joy Eslava a La Riviera, y de hecho agotó el papel que salió a la venta. Por eso, lo que me atemoriza es que Brandon reflexione tras estas experiencias y dé por finiquitado a The Killers comprobando que por su cuenta él solito se basta.El sábado volveremos con la revisión del disco que toque y con otra crónica de concierto de algo que, salvo que la lluvia lo fastidie, viviremos mañana por la noche. Un evento que llevo esperando mucho tiempo y que por fin parece que mañana se llevará a cabo; de ahí que hoy de forma excepcional hayamos publicado la crónica del concierto de anoche. Brandon, en Madrid se te aprecia y se te tiene en estima. Gracias y hasta la próxima ocasión que decidas hacernos una visita.
Mal día se presentaba para tener que aguantar una cola a la intemperie. Una jornada que desde la madrugada se había presentada lluviosa, no me hizo pensar en una sesión de espera placentera y seca en las puertas de la sala; sin embargo, tras salir del metro de Puerta del Ángel, y con un periódico que encontré dispuesto sobre la cabeza a modo de resguardo, descubro que no llueve. Daría igual, ya que sobre las 18.30 empezó a caer una chupa de agua tremenda, que de no ser porque una chica de la cola tenía un paraguas de sobra y nos lo prestó a los 3 amiguetes tan poco previsores que nos juntamos, hubiera degenerado en una pulmonía de 3er. grado en el día de hoy.
Tras haber llegado a la cola a las 17.30h, conseguimos situarnos en 7ª fila justo en la vertical trazada desde el poste del micro desde donde partirían los habituales movimientos de Brandon sobre las tablas. La espera hasta que a las 22h saltase Brandon Flowers al escenario, se hizo mucho más corta que la de una hora y cuarto de Supertramp, básicamente por estar acompañado de buenos amigos y por otro lado porque también hubo sitio para unos teloneros nuevamente interesantes. Son varios los ejemplos de teloneros que me han sorprendido gratamente a lo largo de mi vida conciertera; no ha mucho tiempo fueron The Monomes en el concierto de Hombres G de Alcalá de Henares de finales de agosto y también recuerdo con mucho cariño a How I Became The Bomb, como teloneros de Editors en noviembre de 2007 en Joy Eslava en el Wintercase de aquel año, por citar algunos ejemplos.Bueno, pues aquí fueron Rewards los que se llevarían la palma. Lo curioso es que estaban promocionados como cuarteto, pero quienes salieron a tocar fueron solamente 2 componentes, una chica que se encargaba de las bases electrónicas y un chico que era la voz y guitarra. No sé si sería un caso como el de Najwa en el Festival Be Open, que aquel día solamente acudió con 2 componentes que la acompañaban en lugar de toda la banda que la escuda. En todo caso, con solamente 2 miembros en las tablas, se bastaron para dar forma a una serie de composiciones a lo largo de una media hora que se movieron entre lo ambiental, lo gótico a ratos, lo misterioso y que en todo caso es una banda sonora nocturna perfecta para escuchar en casa con buenos alimentos. También resultó exótico el ver en escena a una chica con un aspecto muy parecido a Sinéad O’Connor y a un chico con una apariencia cercana a la del malogrado Kurt Cobain. Menuda mezcla hubiera sido en su día si los 2 hubieran mantenido sus estilos. Al margen de esta pequeña broma, terminemos el apartado de los teloneros diciendo que Rewards supieron aprovechar su hueco ofreciendo una serie de temas con matices muy interesantes. Hubo lugar para la interacción con el público, lo cual también suma a su favor, ya que el cantante y guitarrista habló bastante con la audiencia y también contrarrestó tanta foto por nuestro lado, filmándonos a los que allí estábamos viendo su repertorio. Habrá que escuchar algo más a fondo de ellos, porque no sonaron nada mal. Apuntar que he ido a ver su myspace, pero no me cuadran primero con lo del cuarteto mencionado y 2º porque no figura ninguna chica entre sus componentes. ¿Alguien puede aportar algo al respecto? Se agradecerá cualquier comentario explicatorio. Arriba de este párrafo les he dejado una foto de ellos.Llegaron las 22h y la aparición de Brandon en escena era inminente. Había ganas de ver nuevamente a este carismático chico de Las Vegas, ya a estas alturas consolidado padre de familia. Era la 3ª vez que tenía cita con Flowers, tras los 2 encuentros anteriores con el mismo en junio de 2007 en Las Ventas y en marzo de 2009 en el Palacio de los Deportes, ambos con su banda The Killers y de los cuáles tienen disponible la revisión del último de los citados en el blog; lo digo por si quieren echar un rato la vista atrás.Hay que tener en cuenta algunas consideraciones previas e ir mentalizado a un show en solitario de un líder de una banda y más aún cuando dicho show corresponde a su primer disco en solitario. Hay varias, pero 2 principales que paso a desarrollar. Primero de todo, si estamos hablando de su inicio por su cuenta, más allá del grupo que le dio la fama, no esperes que el repertorio esté plagado de temas de su banda matriz; eso sería hacer de menos a su repertorio y disco actual, que al fin y al cabo es lo que viene a promocionar. 2ª consideración: si tenemos en cuenta la primera explicada, con un disco en el mercado, es normal que la duración del concierto no sea demasiado larga, a no ser que se marque mil y una versiones o toque alguna que otra canción 2 veces (que de vez en cuando puede pasar). Además, hay que mirar el precio de la entrada. 30 eur. para un artista del caché de Brandon Flowers, que aunque venga sin Vannucci, Stoermer y Keuning tiene su tirón, es poco dinero para un show de hora y media. Vamos, que lo más que puedes esperar es una hora y 10 minutos y date por satisfecho.Si llevas principalmente claras estas consideraciones, es probable que quedes contento. Si te esperas algo distinto, probablemente salgas con un cabreo monumental de la sala, pero es que para otros ejemplos futuros que pudieran darse (disco en solitario de Chris Martin, disco en solitario de Alex Kapranos… ¿Yo qué sé?), esto es lo que tocará y mejor que vayan interiorizando lo que hay. Yo lo tenía bien claro, y no me equivocaba. No obstante lo que dispuso Brandon para la noche de ayer, tuvo ciertos giros o marchó por unos derroteros por los que no hubiera apostado a priori y algunos otros que tampoco me hubiera imaginado a medida que se iba avanzando en el concierto.Lo primero de todo fue ver el estilismo de Flowers. Cuando pasados unos 5 minutos de las 22h saltó al escenario de La Riviera, desatando la histeria de todos los seguidores allí congregados, me sorprendió verle vestido en tonos marrones y con unos tirantes por encima de la camisa sujetándole los pantalones; había visto en youtube algún video de la gira, y había visto a Brandon con su habitual camisa y chaleco, manteniendo esa elegancia que era ya marca de la casa en las 2 últimas giras de The Killers. Sin embargo, aquí Brandon Flowers se presentó con un look nuevamente sureño, pero en esta ocasión no asemejándose a un caballero del estilo de Clark Gable en “Lo Que El Viento Se Llevó” (como en la época de “Sam’s Town”), sino más bien cercano al aspecto de un granjero familiar, que vive felizmente con su mujer y sus niños en un rancho; ¿Acaso no será la vida que sigue Brandon en su finca cerca de Las Vegas con su mujer Tana y sus 2 hijos? Ante todo honestidad, pensé. Por otro lado, en lo que a su rostro se refiere, Brandon se dejó una incipiente perilla de 3-4 días, alejada aún del look de “Sam’s Town”, donde tan remarcado estaba aquel bigote; es curioso, ya que en el reciente video estrenado de “Only the young”, Brandon aparece perfectamente afeitado a la par que vestido de una forma tremendamente elegante, al estilo de un James Bond de la época gloriosa de la saga. También hay que destacar que el escenario fue revestido de la estética de la portada, intentando recrear el mobiliario de la misma, con un telón de fondo con unas lámparas enormes sobre la cortina de tonos dorados que cubría toda la retaguardia y la cómoda de cajones de color marfil dispuesta en la zona de los teclados. La tarima que sostenía la batería tenía claramente puesto el nombre del artista, flanqueado por 2 picas de la baraja francesa de cartas, que sumaba al aspecto de casino de Las Vegas que tanto gusta a Flowers.Más allá del aspecto superficial, pero no baladí, de la imagen, Brandon se empeñó en seguir desmontando ideas y tiró por los suelos las apuestas unánimes que habíamos hecho en pensar que “Welcome to fabulous Las Vegas” sería el tema de apertura. De hecho a la postre este tema ni apareció en el set list, siendo el único corte del cuerpo principal del disco que no hizo acto de presencia. Por fortuna, tampoco fue “Crossfire” quien de forma evidente diera el pistoletazo al concierto (recordarán algunos que fui crítico con que “Human” abriera el show del 22 de marzo de 2009 de The Killers en el Palacio de los Deportes), sino que Brandon eligió la versión 2.0 de “On the floor”, que de hecho no aparece tal cual así en el disco. Y es lo que ya comenté en su día, cuando un público está entregado y ansioso de que salgas a escena, cualquier tema es bien recibido y no es lógico gastar una bala potente de inicio. No obstante, creo que “Welcome to fabulous Las Vegas” hubiera sido un mejor comienzo, pero al menos Brandon quiso arriesgar y decidió entrar de forma sigilosa e íntima, sin hacer mucho ruido, para poder comprobar cómo la gente se sabía de pe a pa la letra de esta pista. Acto seguido ya se empezó a hacer camino de forma más marcada con la presentación en la sala de “Crossfire”, la cual propició que la iluminación y juego de luces comenzara con fuerza y la gente se metiera de lleno tras la emoción contenida de “On the floor (2.0)”.Hay que destacar que Brandon estuvo mucho más comunicativo con la audiencia que en sus visitas con The Killers, en las que no habló demasiado. Por ejemplo, tras “Crossfire” le llegaba el turno a la luminosa “Magdalena”, y antes de interpretarla Flowers empleó un minuto aproximadamente de discurso para explicarnos a la audiencia de qué iba la canción, utilizando un inglés correctamente hablado, que permite a toda la gente con unas nociones básicas de comprensión de inglés entender perfectamente lo que nos contaba; por mucho inglés que sepas, a otros cantantes de otras bandas es imposible seguirles el hilo. “Magdalena” sonó brillante, y sus coros tan destacables retumbaron en la sala gracias a que la gente no se pensó ni medio segundo entonarlos como se merecían.Siguiendo con el apartado de la comunicación y dando el salto al final del show, Brandon despachó al resto del grupo, al cuál por cierto no presentó (cosa rara la verdad, ya que de esa forma, alargando un tema, se puede ganar 5 minutos más en el escenario y de paso quedas bien con tus empleados), quedándose a solas con el teclista de prominente barba, el cual empuñó una guitarra española. Flowers en esta ocasión antes de la pieza final, nos contó que una de las mejores cosas que le había reportado este disco y esta experiencia, era el haberle encontrado un sentido distinto al tema con el que daría carpetazo al espectáculo. Apuntó que aunque considera que el tema en sí suena genial y es estupendo como es en su formato original, también le gusta este nuevo enfoque que le han dado. Brandon se estaba refiriendo a una versión acústica del ya clásico de The Killers “When you were young”, el cual sonó muy bien y en parte sumó a favor de la gente que esperaba más de la banda origen del cantante. Alguno que otro por mi zona pedía a gritos “Mr. Brightside”; en esos momentos, me partía de risa internamente.Tras haber hablado del apartado de la interacción vocal con la audiencia, más allá de apuntar que Brandon estuvo más o menos como cuando toca con su banda, es decir, moviéndose por todo el escenario de lado a lado y subiéndose a los bafles de cuando en cuando, con una increíble teatralidad y expresividad en cada uno de sus gestos y muecas, pasemos si les parece ahora al apartado de sorpresas. Quizás en este sector del show, estaría la citada pieza de cierre en forma de versión unplugged de “When you were young”; y realmente para mi lo fue, ya que las otras 2 sorpresas mayores se me desvelaron de forma no intencionada al ver la página “Plásticos Y Decibelios” de Julián Ruiz, en la que el periodista dio cobertura al concierto debut de Brandon en Las Vegas. Ahí descubrí que Brandon Flowers hacía suya para esta gira la estupenda canción “Bette Davis eyes” de Kim Carnes (menudo cachondeo nos traemos precisamente uno de los amigos asistentes al show y yo al respecto de dicho nombre). Y precisamente fue al comienzo del concierto cuando hizo acto de aparición. Brandon estuvo soberbio al micrófono, entonando de forma muy correcta cada uno de los versos de este clásico del pop de comienzos de los 80 y dándole una envoltura muy emotiva.Otra sorpresa, que también me sabía por desgracia, ya que me hubiera supuesto un subidón en su momento en caso de haber desconocido su inclusión, fue que “Losing touch” de “Day & Age” estaba incluida en el show, con una versión menos ampulosa y de bombo y platillo como es la original. Parece ser que Brandon me hizo caso en su día cuando pude hablar con él y le pregunté que por qué motivo no la incluyeron en el concierto de Madrid del 22 de marzo de 2009 y en varios conciertos de su gira. Sonó bien, algo más oscura y decadente, no tan excelente como la original (lo cual es imposible), pero fue en parte una espinita clavada que me saqué de aquel fabuloso concierto que The Killers dieron hace un año y medio en la capital. Gracias Brandon.El resto era más o menos esperado, y lo que tenía en duda un servidor de ustedes era sobre qué pasaría con los bonus tracks de la deluxe edition. En 6º lugar del set list, hizo acto de presencia “Right behind you”, que tuvo una intro en plan acústico que me hizo pensar en una versión 2.0 al estilo de la de “On the floor”, y que a priori dejó en fuera de juego a un amigo mío que adora la electrónica utilizada en esta pieza. Pero, lo dicho, era tan solo una intro y tras la misma “Right behind you” sonó muy parecida a su versión del disco, aunque sí es cierto que con una carga menor en las mezclas para los teclados (o al menos así se percibió en la 8ª fila centrado el escenario). En el bis, aparte de la citada y comentada versión de “When you were young”, se incluyó la pieza medio country “The clock was tickin”; un tema que ya les he comentado que no me hace mucho tilín, pero que debido a la interpretación de Brandon y sus movimientos y gestos durante la misma en el escenario, se me hizo muy llevadera. Además, un tema de este corte country no podía dejarse fuera al presentarse Brandon en escena de la forma que lo hizo con el ya explicado look de granjero y hombre de familia sureño. Por cierto, ¿no les recuerda algo la siguiente foto que le cogí a Brandon, en lo que a su postura se refiere, a la portada del disco “Your Arsenal” de su admirado Morrissey? En esta foto Brandon parece estar más “alegre” que Mozza, al menor por la posición del micro.Como “Right behind you” apareció más o menos temprano al empezar el concierto, daba por sentado que “Jacksonville” estaría incluida en el repertorio. Pasaban las canciones y no llegaba el momento. Sonó “When you were young”, Brandon se marchó a los camerinos, las luces se encendieron y ni el apellido del cantante… En esta ocasión, debido a que había mucha gente vagando por el recinto tras el concierto y que La Riviera no da mucho lugar a la imaginación a la hora de que el artista abandone el recinto, con lo que la gente se apelotona para esperar al artista, no me quedé para intentar hablar con Brandon como hice la pasada ocasión que acudí a ver a The Killers, pero si lo hubiera hecho, le hubiera vuelto a preguntar por “Jacksonville”, al igual que en su día lo hice con “Losing touch”. Quizás si me hubiera quedado, Brandon hubiera tomado nota y en la próxima gira de The Killers la hubieran incluido con un enfoque distinto, ¿quién sabe? En todo caso, que esta pieza no sonara fue para mi gusto el punto más negativo de la noche. También me parece excelente “I came here to get over you” y fue otro de los descartes junto a la potente “Welcome to fabulous Las Vegas”. Por 5 minutos más que hubiera supuesto “Jacksonville” en el show, no hubiera pasado nada y el espectáculo hubiera subido desde mi punto de vista bastante.Hablemos de los puntos álgidos de la noche. Quizás el momento de máxima intensidad vino de la mano de la arrolladora “Jilted lovers and broken hearts”. También dispuesta de forma inteligente durante la parte inicial del show, esta pieza terminó de romper la sala y el público se metió más que nunca en el show, en un in-crescendo de intensidad gracias a disponerse en este orden “On the floor (2.0)”, “Crossfire”, “Magdalena”, “Bette Davis eyes” y luego este colofón de la catarsis en estado puro. Pero en los momentos de mayor brillo no tiene por qué ser la intensidad lo que determine que lo sean, sino la emotividad, y en este apartado destacó sobremanera la maravilla sonora que es “Swallow it”. La gente la ha marcado como una de las piezas preferidas del disco “Flamingo”, y los coros por parte de la audiencia cuando apareció al final del show lo demuestran. Con una tenue iluminación (que en parte me chafó un video que hice de la misma con mi precaria cámara de fotos), Brandon nos invitó descaradamente a sentarnos en su particular habitación de hotel a “relajarnos” tal como dice en la letra de esta gran composición. Acto seguido, también se celebró la aparición del 2º single promocional del disco “Only the young”, que sonó muy bien, destacando aquí los teclados y electrónica sobre el resto, marcándose mucho ciertas notas, al contrario de lo que pasó con “Right behind you”. Abajo podemos ver a Brandon dándolo todo ante el micro.Ya he comentado que solamente faltaron a la cita “Jacksonville” (muy reprochable), “I came here to get over you” y “Welcome to fabulous Las Vegas”. Es decir, el resto de las no citadas también tuvieron su lugar. Por ejemplo, la muy valorada por muchos “Playing with fire” (entre ellos uno de mis amigos), se ganó los favores de ser el tema que dio por finalizado la parte troncal del show antes de los bises. Sonó decadente e íntima, tal como es y evidentemente nos dejaba con ganas de más, bien preparados para la propina que tocaría. “Was it something I said?” se situó más o menos en el ecuador de la actuación y sonó muy simpática y movidita, invitando al público a moverse en lo poco de espacio vital que había entre una y otra persona en una Riviera abarrotada para la ocasión. En este apartado apuntar que quizás estuve más presionado e incómodo antes de la actuación de The Rewards, que luego durante la actuación de los mismos e incluso durante la hora que Brandon estuvo en el escenario. Me esperaba más apreturas e intensidad, como así fue en el Palacio de los Deportes en el desaforado ambiente que se respiraba aquel día con The Killers. Y como no, “Hard enough” también pasó, pero con más pena que gloria en la 2ª mitad del show, en la que las 2 coristas que acompañaban a Brandon tuvieron quizás su mayor momento de protagonismo. Por cierto, abajo una foto de las mismas.Y ya que hablo de las coristas, hablemos del personal que acompañó a Flowers. Aparte de las 2 chicas encargadas de escudar en lo vocal a Brandon, hubo sitio para un bajista, un guitarrista, un batería (que en el bombo de su batería tenía dibujado un flamingo para terminar de rubricar la escenografía del show) y un teclista que no restaron ni un ápice de protagonismo a Brandon. De hecho, como ya he comentado, Flowers ni siquiera les presentó, lo cuál considero un pequeño feo detalle por su parte. Estos músicos tenían bien claro quien es la estrella y para lucha de egos, ya hay suficiente en The Killers, en donde cuando aparecen en escena el único que parece dedicarse a lo suyo sin necesidad de entrar en guerras personales es el serio Mark Stoermer.Tras una hora casi exacta de show, las luces se encendieron y la fiesta llegó a su fin. Debido a que el recinto fue el más pequeño donde he tenido ocasión de ver a Flowers y el tono más relajado de muchas de sus canciones en comparación con la intensidad de las piezas de The Killers, me queda una impresión de haber asistido a un concierto más íntimo, cálido y cercano que los ejemplos de intensidad y energía sin límite que viví con The Killers en 2007 y 2009; de hecho, aquel show en Las Ventas de 2007, también siendo de una hora de duración, fue de los mejores conciertos que he vivido nunca y de los más arrolladores e intensos que he visto. Me eché a reír recordando aquel día las críticas que había leído antes de que The Killers no eran buenos en concierto… Les dejo a continuación una fotografía de un setlist que consiguió un asistente (esta vez yo no estaba lo suficientemente cerca como para ganarme ese favor), para que se hagan una idea más clara si cabe de lo que fue el concierto.En definitiva fue un buen concierto lo que vivimos ayer apenas hace 24 horas. Personalmente quedé satisfecho porque sabía perfectamente qué era lo que había. Las consideraciones previas que hay que tener en estos casos, como ya les he mencionado antes, las llevaba muy claras. Lo único que reprocho es que se dejara en el tintero un tema tan grande como “Jacksonville” en el show, y más aún cuando los bonus tracks de la deluxe edition sí que hicieron acto de presencia. He leído durante el día de hoy un par de crónicas del concierto y la verdad es que me he asustado de la de palos que han metido a Flowers en las mismas.Quizás es que un servidor sea muy fan de Brandon Flowers y su banda y The Killers se confirmen como mis “The Cure de la actualidad”, en lo referido a ser mi grupo favorito, y claro al ser Flowers el líder de los mismos le vea con muy buenos ojos. Intento ser objetivo y creo que lo soy. Desde mi punto de vista fue un show de muy alta calidad y Brandon se ajustó perfectamente a las necesidades de la ocasión, mostrándose nuevamente en escena como un perfecto frontman que llena el escenario, que sabe moverse de una forma muy especial por el escenario y ante todo, y esto es lo más importante, demostrando que es uno de los mejores cantantes de la actualidad. Que no es poco.Ya estoy esperando la próxima vez que vea a Brandon en escena, supongo que para entonces ya con The Killers. La experiencia de ayer mereció la pena y la relación calidad-precio fue satisfactoria. Un aspecto que me da miedo, es que Brandon tiene mucho tirón, aún sin su grupo. Consiguió ampliar el aforo, cambiando de Joy Eslava a La Riviera, y de hecho agotó el papel que salió a la venta. Por eso, lo que me atemoriza es que Brandon reflexione tras estas experiencias y dé por finiquitado a The Killers comprobando que por su cuenta él solito se basta.El sábado volveremos con la revisión del disco que toque y con otra crónica de concierto de algo que, salvo que la lluvia lo fastidie, viviremos mañana por la noche. Un evento que llevo esperando mucho tiempo y que por fin parece que mañana se llevará a cabo; de ahí que hoy de forma excepcional hayamos publicado la crónica del concierto de anoche. Brandon, en Madrid se te aprecia y se te tiene en estima. Gracias y hasta la próxima ocasión que decidas hacernos una visita.
8 comentarios:
Bueno, aunque te he leído cosas buenas y malas, creo que voy a descubrir a este artista y a su anterior grupo, no pinta mal, de hecho ahora mismo lo estoy eschuchando gracias a Spotify.
Ya te dire si realmente me gusta o no.
Saludos
Vaya¡, pero si tienen una versión de Romeo and Juliet de los Dire Straits.
Ya me han ganado.
Aaron Pfenning e Caroline Polachek (The Rewards) fazem parte dos Chairlift, que não sei se continuam a existir.
http://en.wikipedia.org/wiki/Chairlift_(band)
http://www.youtube.com/watch?v=KvDmov5HmJM
Correcção
A moça que acompanha o Aaron Pfenning em The Rewards é Emily Wroe.
Buen concierto, sí señor!
¡Me ha enganchado tu crónica del concierto de principio a fin! Me habría encantado ir, porque me gustan muchísimo The Killers... "Day & Age" y "Flamingo" son de lo mejor que he escuchado últimamente.
Por cierto,muchas gracias por el comentario que me dejaste en el blog. No aspiro a los 3000 euros porque soy realista y sé que hay blogs infinitamente mejores,pero se agradece jeje.
De hecho tengo ya hechas mis apuestas y creo que ganará uno de estos 4:
-Cine más cómics.
-El mundo desencajado.
-El ojo de Darwin.
-Historias de nuestra historia.
Por cierto, deseo de todo corazón que el próximo año te presentes Y GANES en tu categroría. Porque el trabajo que haces desmenuzando los discos y conciertos de esta forma tan personal, profesional y currada no lo hace nadie más.
¡Un abrazo!
Abacab, me ha encantado tu crónica. Yo estuve en La Riviera, y me pareció fantástico su directo.
Por cierto, sabiendo que te gusta Genesis y puedes hablar con Brandon, ¿qué te parece proponerle una versión de "Land of Confusion" para The Killers o para él sólo?
Serreina, a buen seguro creo que The Killers y Brandon Flowers te gustarán. Ciertamente, tienen varias versiones y entre ellas la citada de los Dire Straits. Ya me comentarás qué te van pareciendo.
Mirtilho, a pesar de que tu respuesta es en portugués (o eso creo), muchas gracias pues lo comprendo o suficiente y aportas la información que solicitaba sobre Rewards.
Donativos, en efecto lo fue.
José R. González, muchas gracias por tus palabras. Yo (siendo muy optimista) no tengo perdidas las esperanzas para este año ganar el premio del jurado. Es difícil, pero más lo veo que salga votado por elección popular el mejor de mi categoría algún año; en eso influyen más cosas aparte de la supuesta calidad de un blog y yo tengo poco tiempo para visitar otros blogs y darme autobombo por ahí.
Jesús, celebro que te haya gustado la crónica. Ójala pudiera charlar con Brandon de forma habitual; solamente hablé una vez con él y fue tras el concierto de The Killers del 22 de marzo de 2009 durante un minuto aprox., en el que intercambiamos algunas frases. No obstante, la versión de "Land of confusion" de Genesis que propones realmente les quedaría muy bien a estos muchachos de Las Vegas. Creo que se ajustaría muy bien al timbre vocal de Brandon. Ahí has tenido buen ojo, la verdad.
A todos, gracias por escribir.
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